Gisela González ha vivido casi una década en la etapa 2 del sector de Las Pozas del cantón Milagro y solo en dos ocasiones (2015 y 2016) ha visto cómo el agua de un estero cercano se desborda y se mete en las viviendas.

La ciudadana forma parte de las 27 familias (117 personas) que hasta ayer aún permanecían en los albergues activados por el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) cantonal.

El albergue municipal, ubicado en Las Piñas, es el sitio en donde se ubicó a la mayoría de los damnificados (99) cuyas viviendas aún permanecen anegadas y en riesgo de colapsar.

El lugar está al tope de su capacidad y las familias son atendidas por personal de la Alcaldía de Milagro y  del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES).
Mientras que en la Unidad Educativa Velasco Ibarra se acoge solo a dos familias (18 personas).

González comentó que han recibido la atención médica y alimentación necesarias. “Lo único que incomoda a veces es que hay madres de familia que no quieren ayudar”.

Los albergados reciben capacitación en cuanto a la optimización de los recursos disponibles: alimentos y artículos de higiene y limpieza. Se organizan turnos para cocinar y mantener limpios los baños.

Los gritos de los niños jugando en el pasillo se mezclan con el bullicio que sale desde las cocinas donde las madres de familia coordinan la preparación del almuerzo.
Angélica Gómez, del sector Bellavista, expresó que “las personas que permanecen en el albergue de Las Piñas son quienes no tienen familiares que los puedan acoger mientras dure la emergencia”.

Su casa quedó cubierta con casi  medio metro de agua y cada día, desde el viernes anterior, recibe noticias sobre las condiciones de su propiedad. “Aún no nos han dicho si nos reubicarán en otro lugar”.

Al respecto, Denisse Robles, alcaldesa de Milagro, informó que se está desarrollando un plan de reubicación para las familias que viven en las zonas de riesgo.

En total, se utilizarán 27 hectáreas de terrenos para el desarrollo de proyectos habitacionales. “También estamos desarrollando un plan macro para mejorar el alcantarillado”, acotó.

Se estima que el 50% del cantón es susceptible de inundación, pero los sectores más críticos son: Margaritas 2, Las Palmas, San Carlos, Bellavista, Dager y Pozas 2. En estos puntos, hubo que evacuar a 121 personas y la mayoría ha sido recibida en hogares acogientes.

Las familias que receptan a los damnificados no tienen que costear alimentación e higiene, debido a que los visitantes cuentan con kits para suplir sus necesidades, comentó Amada Zambrano, coordinadora zonal 5 del MIES.

Por otra parte, las autoridades de la Secretaría de Gestión de Riesgos (SGR), Prefectura del Guayas y del Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap)  hicieron ayer un sobrevuelo por distintos puntos afectados de la provincia. Felipe Bazán, subsecretario General de la SGR, informó que se ha realizado una evaluación aérea en menos de 24 horas. Entre las áreas observadas estuvieron Durán, Yaguachi, Naranjal, El Triunfo, Taura y Milagro, siendo más comprometidas las zonas urbanas de Milagro y rural de Taura.

“No tenemos víctimas que lamentar, pero sí inundaciones producidas por el desbordamiento de varios ríos. Las obras construidas por el Gobierno Nacional para mitigar las anegaciones han tenido un funcionamiento efectivo, de lo contrario estaríamos hablando de otros temas”, dijo el funcionario.

Jean Grunauer, director provincial del Magap, indicó que hay aproximadamente 2.000 hectáreas de producción agrícola afectadas y que el Ministerio está realizando censos y levantamiento de los productores, para dar la ayuda necesaria en caso de afectación parcial o pérdida total de los cultivos. Los productos que corren el riesgo de perderse son cacao, maíz y arroz. (I)

DATOS

Los bomberos de los cantones orenses Santa Rosa y Piñas abastecen de agua a las familias de Portovelo, en la parte alta de esa provincia.

El fin de semana, por los aguaceros, se produjo un deslave que destruyó un tramo de aproximadamente 27 metros del canal que conduce el agua desde el río hasta la planta de tratamiento en el barrio San José.

La alcaldesa de Portovelo, Paulina López, manifestó que entre hoy y mañana se restablecerá, de manera paulatina, la dotación del líquido en los hogares. Varios negocios padecieron por la restricción.

El ECU-911 de Machala reportó ayer deslizamientos de lodo y piedras en la carretera Saracay-Piñas. La entidad exhortó a los conductores a tomar precauciones. Hasta el cierre de esta edición, maquinaria de varias entidades trabajaba en el sector, con el objetivo de retirar el material. (I)

Personal del Municipio, MIES y el Ministerio de Salud atienden a las familias acogidas en el albergue ubicado en el sector Las Piñas. Foto: José Morán / El Telégrafo

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Buses suspendieron los viajes

El colapso de un puente aisló a 2 cantones orenses

Una de las vías principales para las poblaciones productivas de los cantones Zaruma y Atahualpa está bloqueada. Ello tras el colapso del puente sobre el río El Palto, a consecuencia de las últimas lluvias en la parte alta de El Oro.

Los conductores que intentan llegar a Zaruma, tienen que tomar la vía que conduce al cantón Piñas, luego pasar por Portovelo para poder llegar a su destino. Esto les tomaría aproximadamente una hora más de viaje.

Según la Jefatura Política de Atahualpa, la cooperativa de buses Paccha, única en el cantón, está paralizada y los usuarios hacen trasbordos. “El servicio está suspendido por los deslizamientos y mal estado del puente”, afirmó el titular de ese despacho, Ítalo Armijos, luego de un recorrido.

El fin de semana, técnicos del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) y de la empresa que realiza la ampliación de la vía inspeccionaron el lugar. En las próximas horas será colocado un puente bailey.

El alcalde de Atahualpa, Exar Quezada, afirmó que el sábado la situación se complicó por las fuertes lluvias. Así, un deslizamiento de gran magnitud se produjo en el sitio El Cristal e interrumpió la vía Paccha - Zaruma y parte del lodo llegó hasta una vivienda. (I)

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Hay 5 fallas en otra carretera

Desbordamiento destruyó parte de una vía azuaya

Los torrenciales aguaceros que cayeron el fin de semana en el sector de Sarayunga, cantón Pucará, causaron problemas en los pobladores. Una quebrada cercana a la parroquia se desbordó y a consecuencia de ello un tramo de la vía que conduce a la comunidad quedó destruido. El servicio de transporte que conecta a Cuenca y Machala, por este camino, tuvo que suspenderse.

Los choferes deben desviarse por el sector de Chilcaplaya, para luego irse por Uzhcurrumi y así dirigirse al cantón Pasaje, en El Oro. Funcionarios del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP), y técnicos de la Secretaría de Gestión y Riesgos (SGR) evaluaron ayer la situación en este lugar.

Del mismo modo, la carretera Molleturo-Puerto Inca fue afectada por las lluvias. El director provincial de esa cartera de Estado, Pablo Cordero, recorrió la zona.

La inspección se enfocó en los cinco puntos críticos que hay en esa pista por las fallas geológicas. La primera está ubicada en el km 66, sector San Pedro de Yumate; la segunda, en el km 74, sector Yerbabuena; la tercera, en los kilómetros 82 y 84, sector La Curva de Retorno; la cuarta, en el km 90, sector San José de Guarumal; y la quinta, en el km 101, sector Tamarindo. Cordero indicó que estos problemas provocan el hundimiento de la calzada. Recomendó, a los usuarios de la vía, reducir la velocidad cuando transiten por los sectores mencionados.

Las lluvias también incrementaron el caudal de los ríos de Cuenca. El Tomebamba  tenía ayer 7.16 metros cúbicos por segundo, mientras el Yanuncay 7.04 metros cúbicos de agua por segundo. (I)