El delantero Kylian Mbappé, del Mónaco, simboliza el entusiasmo juvenil y la potencia ofensiva de su equipo, mientras que el arquero de Juventus, Gianluigi Buffon, dibuja  la inmensa experiencia y el arte de la defensa de su club. Ambos planteles se enfrentan hoy (13:45, hora de Ecuador) en un choque de estilos en las semifinales de la Champions.

Un niño contra un veterano. ‘Gigi’, de 39 años, juega esta tarde en el Principado su partido 150 en torneos europeos de clubes, mientras que Kylian, de 18 años, sumará el octavo. “Es joven, pero ya es muy eficaz ante el gol”, señala Buffon, quien calificó a Mbappé como “el nuevo Thierry Henry”, en una entrevista con la página web de la UEFA. “Yo ya había jugado la Copa del Mundo de Francia (1998) cuando él nació”, subrayó ayer en rueda de prensa el legendario arquero de la selección italiana.  

Esta diferencia ilustra a la perfección la diferencia entre los perfiles de ambos equipos. Mónaco es el equipo más joven de la Champions (25,28 años de media) y la Juventus el más veterano (29,55), según las cifras de la confederación europea.

Entre los hombres con experiencia del plantel del Principado están el colombiano Radamel Falcao (31 años) o el polaco Kamil Glik (29), antiguo capitán del Torino, que recibe con apetito al gran rival de su exequipo. En la Juventus sus dos zagueros han jugado una vida juntos. El luchador Giorgio Chiellini (90 partidos con Italia) y el ‘Beckenbauer del siglo XXI’, Leonardo Bonucci (69 selecciones), se entienden con los ojos cerrados.   

El de hoy también será un duelo entre una delantera goleadora y la defensa más aplicada de Europa. El Mónaco ha marcado 146 goles en 57 partidos, mientras que la Juventus solo ha recibido dos goles en esta Champions y la reacción de su portero resume su cultura defensiva: “Los podíamos haber evitado”. 

El equipo dirigido por Massimiliano Allegri, que analiza minuciosamente el juego de sus adversarios para preparar la táctica, no subestimará nunca al Mónaco. Los del Principado marcaron tres goles en cada uno de los cotejos ante el Manchester City y el Borussia Dortmund en las rondas precedentes, con Mbappé sumando cinco, destrozando muchos récords de precocidad. “Debemos jugar con el cuchillo entre los dientes. Pero cuando logramos estar 180 minutos en cuartos ante el Barcelona de Messi, Neymar y Suárez sin encajar un gol, no tenemos miedo de nada”, explicó ayer Bonucci. Además, el 2-2 del viernes en la cancha del Atalanta, otro equipo entusiasta y en forma, le ha servido de aviso.

Mbappé y Buffon son sin dudas los perfectos embajadores de sus clubes. En seis meses fulgurantes, la ‘Perla francesa’ se ha convertido en la estrella del proyecto monegasco, basado en dar oportunidades a los jóvenes talentos, formados en el club, como él, o que llegaron antes de cumplir 20 años, como el portugués Bernardo Silva (Benfica) o Thomas Lemar (Caen).

Buffon, que ha superado los 600 partidos con el maillot ‘bianconero’, ilustra la nobleza de la ‘Vieja Dama’, que cuenta 32 títulos italianos y ocho finales de la Copa de Europa (dos títulos). El gran arquero tiene un palmarés interminable, pero todavía no ha ganado la Champions (dos derrotas en finales, 2003 y 2005). “Sería la mayor alegría de mi carrera tras la victoria en la Copa del Mundo 2006, una recompensa que se obtiene después de un recorrido difícil”, reconoció ‘Gigi’.  

El Mónaco, por su parte, persigue su primer entorchado europeo, tras perder la final de la Recopa en 1992 y la de la Champions en 2004.

Dybala, el heredero de Del Piero

Su doblete al Barcelona en cuartos lo elevó de categoría. El argentino Paulo Dybala, número 21 de la Juventus y talento de dorsal 10, como el que lucía Alessandro Del Piero, será el peligro número 1 para el Mónaco en el cotejo de esta tarde.

Hay dos números míticos en la Juventus. El 10, que lucieron Michel Platini, Roberto Baggio, Del Piero e incluso un año Paul Pogba, y el 21, de Zinedine Zidane, Andrea Pirlo y ahora Dybala.

Tras dejar en la cuneta a su compatriota Lionel Messi con sus dos goles con la zurda en cuartos, varias voces en Italia pidieron al argentino que cambiara de número para la próxima temporada y recupere el 10, símbolo del talento. “Si la Juventus me lo pide, lo cambiaré. Pero no seré yo el que lo reclame”, señaló el atacante tras el empate ante el Atalanta del viernes (2-2).

Tras Dybala habló el mito de la Juventus, Del Piero, presente en el plató de la cadena Sky. “Hace cosas extraordinarias en el campo. Tiene una mentalidad y una eficacia de gran campeón. Lo tiene todo para convertirse en un número 1. Le deseo en todo caso que sea mejor que yo con la camiseta de la Juventus”, dijo ‘Pinturicchio’.

“Del Piero es un ejemplo para mí. Espero convertirme en un símbolo como él para la Juventus”, respondió el argentino, antes de que la conversación se convirtiera en un desafío en las redes sociales.

Dybala ha dado el paso y ahora es el principal referente de una Juventus que busca su tercera Liga de Campeones 21 años después de haber ganado la última, cuando la figura es otro talentoso número 10, Alessandro Del Piero. (I)