Flamengo y River disputarán título de la Libertadores en Lima
La final de la Copa Libertadores se jugará en Lima tras una carambola a varias bandas.
Primero, la ciudad postuló a principios de año para alojar este torneo. Luego fue elegida sede de la final de la Copa Sudamericana, pero más tarde fue despojada de esa designación. Y ahora regresa con éxito a la primera casilla.
Lima fue la opción escogida para sustituir a Santiago de Chile, donde inicialmente se iba a disputar la primera final a partido único de la historia de la Libertadores hasta que las protestas sociales que persisten desde hace más de dos semanas obligaron a replantear la sede del partido entre Flamengo y River Plate.
No parecía que la capital de Perú albergaría un gran acontecimiento internacional de fútbol después de que este mismo año fuese despojada de organizar la final de la Copa Sudamericana, que recayó en Asunción y el Mundial sub-17, que se lo llevó Brasil.
Eso sí, la capital peruana acogió con éxito este año los Juegos Panamericanos, por primera ocasión, desde su creación en 1951.
Así Lima se quedó con las manos vacías hasta hace pocos días, cuando comenzó a tomar fuerza la opción de que la final de la Libertadores no se disputase finalmente en Chile, que ya tuvo que cancelar la cumbre del Foro Económico Asia-Pacífico (APEC) y la cumbre mundial del clima (COP25).
Lima no era la primera opción para reemplazar a Santiago, pues para River Plate era más cómodo jugar en Montevideo, pero justamente para este fin del semana, en Uruguay está programada la segunda vuelta de las elecciones presidenciales.
Otra opción era Asunción, pero la Conmebol no quería que una misma ciudad acogiera las finales de la Sudamericana y la Libertadores.
El presidente de Perú, Martín Vizcarra, agradeció al titular de la Conmebol, Alejandro Domínguez, por “confiar” en su país para ser sede de la final del torneo más importante de clubes.
“Nuevamente Perú en el centro del deporte del continente”, escribió Vizcarra en su cuenta de Twitter. (I)