Guayaquil, Manta, Machala y Ambato.-

Las anegaciones y deslizamientos de tierra ocasionaron daños en vías y casas de Guayas, Azuay, Tungurahua, El Oro y Manabí, tras las lluvias registradas entre la noche del jueves y la madrugada de ayer.

En Guayaquil, por segundo día consecutivo, sectores como Alborada, Sauces, Guayacanes, Urdesa, Garzota, amanecieron con sus calles anegadas lo que provocó congestionamientos vehiculares.

Las situaciones más recurrentes se presentan en las avenidas De las Américas, Juan Tanca Marengo, Agustín Freire e Isidro Ayora. Además, en las calles Venezuela, Sucre, El Oro y Lizardo García hubo problemas para el desfogue de las aguas lluvias.

Mientras que en el sector noroeste donde están Monte Sinaí, El Fortín, Nueva Prosperina, entre otras zonas, existen vías sin pavimentar que se volvieron lodazales.

Los concejales de Guayaquil de Alianza PAIS (Gustavo Navarro, Lídice Aldás y Zayda Loaiza), el pasado jueves, pidieron que el Concejo Cantonal envíe a la Asamblea Nacional una solicitud para reformar la ley 88 (que dispone la legalización y tenencia de tierras en Monte Sinaí) y permita la regularización de los asentamientos consolidados hasta 2010 y que no están incluidos en el estatuto. El objetivo es gestionar ayuda a la brevedad posible.

También se pidió al alcalde Jaime Nebot que se active el Comité de Operaciones de Emergencia Cantonal (COE) “ante la declaratoria de alerta naranja en cuatro provincias, Guayas, incluso”, explicó Navarro.

El Alcalde convocó a una reunión para analizar los sectores afectados por las últimas lluvias y declarar la emergencia. El encuentro fue agendado para ayer y hasta el cierre de esta edición, no se conoció si el COE fue activado.

En Manabí, tras las lluvias registradas en días pasados en Calderón (Portoviejo), las 24 familias que resultaron damnificadas por la crecida de los ríos están albergadas y cuentan con provisiones para los próximos 15 días.

Las autoridades analizan la posibilidad de que los afectados regresen a sus casas. Juan Farías, presidente del Gobierno parroquial de Calderón, indicó que debido a que estas familias vivían en zona de riesgo, es poco probable que retornen a sus viviendas.

En Sacón, el nivel de las aguas baja lentamente, lo cual preocupa a los moradores de este sector de Portoviejo.

En el sector Cruz Alto de Miguelillo, también en Calderón, 120 familias no tienen electricidad a causa del invierno, situación que ya maneja la Corporación Nacional de Electricidad (CNEL).

Mientras que en Machala, provincia de El Oro, la madrugada de ayer cayó una fuerte precipitación que inundó algunas calles del sector céntrico de esa ciudad. En la parte alta de esa provincia, desde mediados de esta semana, no se registraron lluvias de consideración. Aquí las vías que siguen con problemas son la Piñas-Tarapal, Portovelo-Río Luis-Salatí y Pasaje-Paccha.

En la Sierra se desbordan los ríos

El cantón Mocha, en Tungurahua, se volvió en las últimas 72 horas en la zona más afectada por las continuas precipitaciones.

Según la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR), la lluvia del miércoles pasado causó el desbordamiento del canal de riego Tisaleo-Mocha-Cevallos.

La carga de agua y lodo inundó más de 30 hectáreas de sembrados, 4 viviendas y se llevó más de un centenar de animales menores. El aguacero duró cerca de media hora y, en ese lapso, colapsó el sistema de alcantarillado.

Técnicos de la SNGR continúan la evaluación de los daños para gestionar la asistencia humanitaria y entrega de kits con el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES).

Las principales carreteras que conectan Ambato con Riobamba, Latacunga, Puyo, Baños de Agua Santa y Guaranda se mantienen transitables. Mientras que en Azuay, el Ministerio de Transporte y Obras Públicas solicitó  precaución especialmente en la carretera Cuenca-Molleturo-Puerto Inca.

En esta arteria vial, personal de la cartera de Estado limpió el lodo que cayó sobre la calzada a inicios de esta semana, y está habilitado un carril. También se pidió no utilizar, hasta nueva orden, la carretera Sígsig-Chiguinda-Gualaquiza que está en reconstrucción y lleva hasta la Amazonía desde la provincia del Azuay. Los ríos se mantienen caudalosos en Cuenca. La Guardia Ciudadana vigila permanentemente las orillas para evitar que las personas pesquen o se dediquen a lavar ropa. (I)

En la provincia de Azuay, el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) trabaja en la reconstrucción de la vía Cuenca-Azogues. Foto: Fernando Machado / EL TELÉGRAFO