290 hectáreas de cultivos afectadas por la ceniza del volcán Sangay
Ni el abastecimiento ni la calidad del agua potable se vieron afectados por la caída de ceniza del volcán Sangay, ocurrida este martes 9 de junio de 2020 en cinco provincias del país.
Así lo explicó el Director General del Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias (SNG), Rommel Salazar, quien detalló que las provincias afectadas fueron Guayas, Santa Elena, Morona Santiago, Chimborazo y Los Ríos.
Salazar también confirmó que aproximadamente 290 hectáreas de cultivos sufrieron daños a causa del material volcánico. En un primer balance, las localidades agrícolas más afectadas serían los cantones Colta y Guamote (Chimborazo), y las parroquias Palmira Guamboya y General Proaño de Morona (Morona Santiago).
En Guayas, desde las primeras horas de la mañana, usuarios de redes sociales subieron imágenes del evento volcánico; la caída del material fue registrada en los cantones Salitre, Samborondón, Durán, Naranjito, Marcelino Maridueña, Milagro y Yaguachi.
El ECU-911 de Samborondón dio la instrucción de “utilizar mascarillas y cerrar las ventanas de los domicilios”.
Pasadas las 07:00, la Autoridad de Tránsito Municipal de Guayaquil (ATM) aconsejaba a los conductores “realizar una limpieza del parabrisas de sus vehículos para tener una mejor visibilidad antes de dirigirse a su destino. Conduzca con precaución, ya que la calzada se encuentra resbaladiza”, informó la entidad.
Mientras que en varios sectores de la provincia de Santa Elena, la ceniza del coloso también cubrió las zonas urbanas. Los habitantes de las parroquias San José de Ancón, La Libertad, Salinas y Chanduy mostraron sus vehículos con el polvillo volcánico, aunque no en la misma proporción que en otras provincias.
En Chimborazo, los cantones Alausí y Chunchi activaron sus Comités de Operaciones de Emergencias (COE), para evaluar la situación y tomar decisiones. En Alausí se suspendió el tránsito vehicular por 24 horas, se pidió una pausa en las actividades públicas y privadas, con excepción de los servicios de salud pública.
La autoridad se organizó con la comunidad para llevar a cabo mingas de limpieza y evitar afectaciones en el sistema de alcantarillado. Se advirtió que la población no debe subir a los techos de las viviendas para retirar la ceniza, ni utilizar agua para limpiar y que ante la primera sospecha de un posible colapso estructural se comuniquen con el ECU-911.
Finalmente, la Unidad de Agua Potable de Alausí, cubrió con plástico todos los tanques de reserva, para garantizar el consumo en la zona. Las medidas tomadas por el COE de Chunchi fueron similares: detener las actividades comerciales, privadas y públicas, con excepción de sectores de salud y agrícolas. Utilización de una geo membrana en el sistema de agua potable del cantón y realizar pruebas para determinar la calidad de la misma.
En Morona Santiago, el alcalde de Morona y presidente del COE Cantonal, Franklin Galarza, señaló que la nube volcánica alcanzó 1.700 metros sobre el nivel del cráter, y que las cámaras del ECU-911 en la ciudad de Macas, no mostraron caída de lava.
Galarza señaló además que las parroquias 9 de Octubre, Zuñac, así como los cantones de Huamboya y Pablo Sexto reportaron caída de material.
El Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional informó que la cantidad de material piroclástico acumulado en los flancos del volcán, puede desencadenar el descenso de importantes flujos de lodo y escombros.
Fenómenos similares podrían ocurrir en los próximos meses
Los fuertes vientos de la Amazonía provocaron que la ceniza del Sangay llegara a Guayaquil e incluso hasta localidades costaneras de Santa Elena. Foto: Miguel Castro / El Telégrafo
Erupciones con explosiones, emisiones de ceniza y flujos de lava en el flanco suroriental del volcán Sangay, son parte de los eventos eruptivos que se iniciaron en mayo de 2019 y se han mantenido a lo largo de 12 meses.
Benjamín Bernard, experto del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (IG Ecuador), explicó que los flujos de lava han colapsado repetitivamente y han aumentado la cantidad de sedimentos en la cabecera del volcán. Estos colapsos, sumados a la actividad explosiva del coloso, son los que han generado gran cantidad de ceniza.
Detalló que el 7 y 8 de mayo no se evidenciaron cambios importantes en el comportamiento del volcán; sin embargo, los fuertes vientos característicos del verano, provocaron que la ceniza llegue a lugares como Guayaquil. Bernard aseguró que los vientos podrían llevar nuevamente ceniza a lugares distantes los siguientes meses.
Aeropuerto de Guayaquil paró actividades por la ceniza
Varios sectores de Guayaquil amanecieron este martes 9 de junio cubiertos con una gruesa capa de ceniza en las calles y fachadas de viviendas. Esto causó malestar en los residentes, especialmente en quienes tenían que conducir a sus trabajos, pues debieron tomarse más tiempo para limpiar los vidrios de sus vehículos.
Debido a los problemas de visibilidad y suciedad en las zonas de rodaje, el aeropuerto José Joaquín de Olmedo anunció que tuvo que detener sus actividades hasta que el nivel de ceniza disminuyera y se limpiara la pista.
La Alcaldía recomendó cerrar bien ventanas y todo espacio por el que pudieran ingresar las partículas. Para este propósito se pueden utilizar paños húmedos a manera de sello. También advirtió que no se debe utilizar agua para removerlas sino recogerlas y arrojarlas en fundas bien cerradas, pues la mezcla de elementos obstruye drenajes. (I)