Trabajadores reclaman poca acogida de sus propuestas
Luis Pachala, asambleísta por CREO
Por Wellington Molina
Al consultar sobre a quién beneficia la Ley Humanitaria, el asambleísta por CREO Luis Pachala, dijo que a toda la ciudadanía: a los estudiantes al obtener rebajas en sus pensiones, a los arrendatarios quienes no pasarán por desahucio y llegarán a un acuerdo con el arrendador; y a las familias que no se les suspenderán los servicios básicos por falta de pago, incluso las pólizas de salud.
Los créditos serán reprogramados y las tasas de interés revisadas, el IESS extenderá su atención en caso de cese de labores.
Pachala deja claro que la Asamblea ha aprobado dos leyes que no tienen nada que ver con impuestos, tributos, ni contribuciones.
El legislador defiende la ley también porque plantea acuerdos entre las partes que permitirán mantener el empleo y establece sanciones a los empleadores que mientan sobre los estados financieros.
En el mutuo acuerdo, ¿quién toma la mayor decisión?
Es importante indicar que no se ha reformado el Código de Trabajo. Se plantea un contrato emergente y no se ha bajado el sueldo básico; este continúa en los $ 400 para quien trabaja la jornada completa.
Nadie puede hacer nada que sea regresión de derechos. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha recomendado ciertas acciones para proteger el empleo, como leyes temporales. Los derechos ganados por los trabajadores no pueden ser topados. El mutuo acuerdo le permite al empleador que estuvo inactivo, continuar laborando y así no liquidar la empresa y que los trabajadores mantengan sus empleos.
¿La reforma aprobada precariza la relación laboral?
No, esta plantea modificaciones de carácter temporal con la finalidad de preservar el empleo, el mantenimiento de las fuentes de ingresos de los trabajadores, y la estabilidad laboral. Y da oxígeno a las actividades productivas promoviendo la reactivación económica.
Pero los sindicatos dicen quese vulneran los derechos...
De ningún modo, estos se encuentran enmarcados en la libertad de contratación como un mecanismo idóneo para el mantenimiento de las fuentes de empleo como consecuencia de la emergencia sanitaria.
¿Qué dice la Constitución?
El artículo 328 de la Constitución permite la disminución de la remuneración con autorización expresa de la persona trabajadora y nunca esta podrá ser inferior a la remuneración básica unificada. En caso de despido, las indemnizaciones se calcularán con base en la última remuneración recibida antes del acuerdo.
¿Cuál es su opinión respecto a la reducción de horas del sector público?
Debe quedar claro que las medidas adoptadas por el Gobierno no tienen nada que ver con la Ley Humanitaria. Esta aún no está en vigencia porque falta el veto o sanción del Presidente.
No se debía bajar el salario a los maestros, tampoco a los servidores públicos.
Es verdad que hay un arrastre histórico de endeudamiento y déficit fiscal, pero no se debía tocar a este sector peor con un porcentaje tan alto.
Pido al Presidente que revise ese tema.
Por otra parte hay empresas públicas que son innecesarias y cuyo gasto es improductivo. (O)
Mesías Tatamuez, presidente del Frente Unitario de Trabajadores FUT
Redacción Economía
Mesías Tatamuez, presidente del Frente Unitario de Trabajadores (FUT), al iniciar la entrevista deja claro que el 15 de mayo de 2020 fue el día más negro y duro para los ecuatorianos, porque se dio una concertación empresarial y del Gobierno por cumplir la receta del Fondo Monetario Internacional.
¿A quién beneficia la Ley Humanitaria?
La Ley Humanitaria beneficia solo a los empleadores y esclaviza a los trabajadores del sector público y privado, especialmente los nuevos empleos.
El Gobierno Nacional no recogió los criterios propuestos por el FUT; vemos que la ley es inconstitucional y beneficia y premia a los empresarios deudores con una flexibilización laboral, donde les dan poderes como dos años de contratación con la remuneración que ellos consideran y con posibilidad de renovarlo dos años más. Cuatro años trabajando en estas condiciones para nosotros no es una ley de solidaridad sino de esclavitud.
¿El mutuo acuerdo es el principal problema que ven?
El problema de fondo es la falta de economía, la crisis económica y el desacierto del ministro de Finanzas de pagar primero la deuda e intereses y dejarnos sin medicina, alimentos y estabilidad.
Nosotros le propusimos varias salidas por escrito. Cuando dicen que el trabajador va a tener estabilidad y derechos le mienten al país.
Eso hubiese ocurrido si se hacía la cirugía mayor que es la corrupción, que ni en tiempos de pandemia cesó.
¿Cuál fue su planteamiento?
Nosotros propusimos que cuando hay acuerdos de las partes sean tripartitos: empleadores, trabajadores y Gobierno para que el Ministerio de Trabajo no se quede afuera.
Pero el documento aprobado indica que no sea colectivo sino individual; al patrón le dan poderes para que decida la forma de trabajo y la remuneración.
Es tan inconstitucional que ahora el patrón va a organizar las vacaciones del empleado, violando ese derecho.
¿Cuál es su opinión sobre la reducción de horas para el sector público?
El acuerdo es inconstitucional, le quita alrededor del 20% del salario al trabajador público, pero no le dicen que tiene que pagar seguro social.
La canasta básica ya pasa los $ 700, por eso no estamos de acuerdo. Nadie en el mundo ha hecho estas leyes aprovechándose de la pandemia y de la falta de liderazgo que hay en el país. No nos pidan que todo el peso caiga en el pueblo.
¿Cuáles son las medidas que tomará el FUT?
Vamos a demandar la inconstitucionalidad y que Ecuador conozca quién aprobó esta ley y la forma. Nuestra posición era que quienes tienen más aporten. Propusimos una tabla para que quienes generaban de $ 1 millón a $ 5 millones de ganancias aporten un 5%. No se lo consideró, pero ahora sí nos vienen a rebajar los sueldos. Ahora quieren botar a los trabajadores sin planificación, ya son más de 360.000 los trabajadores desvinculados en el IESS.
El pueblo no se va a callar, invitamos a los ecuatorianos a salir a las calles siguiendo los protocolo para reclamar. Creemos que la pandemia que se viene después va a ser la pandemia de la pobreza y del hambre. (O)