En febrero, el ministro de Comercio Exterior e Inversiones, Pablo Campana, presentó al Ejecutivo el proyecto de Ley Orgánica de Atracción de Inversiones.

Este diario tuvo acceso al documento que contiene 168 artículos y modifica cuerpos legales como Ley Orgánica de Régimen Tributario Interno (Lorti) y el Código Orgánico de la Producción, Comercio e Inversiones (Copci) y la Ley de Mercados de Valores.

El proyecto de ley propone una serie de incentivos para fortalecer la producción y la inversión privada, entre ellos, reducción de impuestos, incentivos a la inversión en tecnología productiva, menores plazos exentos de impuestos en los certificados de depósitos bancarios, entre otros.

Dentro de las reformas del régimen tributario se destaca la exoneración del pago del Impuesto a la Renta para el desarrollo de inversiones nuevas y productivas durante 10 años. Esta medida actualmente solo se aplica por cinco años a las inversiones fuera de Quito y Guayaquil. Con la nueva ley también se eliminaría la discriminación geográfica.

El beneficio aplica a inversiones en producción de alimentos frescos, congelados e industrializados; cadena forestal y agroforestal y sus productos elaborados; metalmecánica; petroquímica; farmacéutica; turismo; energías renovables; servicios logísticos de comercio exterior; biotecnología y software aplicados; exportación de servicios.

Por otro lado, las sociedades que ya se encuentren en funcionamiento y que invierten en Ecuador por un monto superior a $ 50 millones, en áreas consideradas como prioritarias, por el Copci o en sectores de sustitución estratégica de importaciones, podrán obtener una reducción de 15 puntos porcentuales de la tarifa del Impuesto a la Renta por un plazo de cinco años a partir de la firma del contrato.

El proyecto también contempla incentivos para reducir los pagos del Impuesto a la Salida de Divisas (ISD). Por ejemplo, quedarían exentos de este tributo los pagos al exterior que efectúen las nuevas sociedades que se constituyan para el desarrollo de proyectos de inversión privada, en los sectores priorizados, cuyo monto sea mayor a $ 100 millones, que cumplan con los requisitos fijados en el Copci y que suscriban contratos en un plazo no mayor a cinco años.

La propuesta además establece el derecho a los exportadores a la devolución  de los pagos realizados por concepto del ISD en la importación de materias primas, insumos y bienes de capital, con la finalidad de que sean incorporados en procesos productivos de bienes o servicios de exportación.

Gremios productivos apoyan esta propuesta. Mónica Maldonado, de la Cámara Ecuatoriana de Industriales y Procesadores Atuneros, señaló que el proyecto de ley beneficia y es un incentivo para impulsar la competitividad del sector.

También Enrique Pita, presidente de la Cámara de Construcción, considera positiva la ley porque estimula y permite que el empresario tenga un nivel de confianza para invertir en el país.

Lenín Parreño, ejecutivo senior del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), mencionó que “después del boom petrolero lo que necesita el país es inversión”. Sostuvo que esta debe ser conveniente, que incluya y genere equidad entre los más pobres, que no sea una inversión de élite y que beneficie a un grupo reducido. (I)

Más incentivos
Zona especial de desarollo
En el caso de aprobarse el proyecto de ley los administradores u operadores de una zona especial de desarrollo económico estarán exonerados del pago del Impuesto a la Renta (IR) durante los primeros 20 años.  

16 cuerpos legales serían modificados con el proyecto de Ley Orgánica de Atracción de Inversiones.

Inversiones turísticas  
Hoteles o restaurantes que se realicen en bienes del patrimonio cultural nacional podrán exonerarse del IR por 10 años. (I)