Andrés Aráuz, subsecretario general de Planificación para el Buen Vivir de la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo (Senplades), dijo que no se puede concebir la erradicación de la pobreza sin la de la desnutrición, y que este tema “debe ser causa de preocupación en todos los estamentos de las instancias públicas”.

Aráuz se refirió a esta problemática en un taller organizado por el organismo y la Secretaría Técnica para la Erradicación de la Pobreza (Setep).

En el país la desnutrición crónica infantil afecta a 1 de cada 4 niños menores de 5 años y causa la reducción irreversible en su desempeño escolar, lo que repercute en su rendimiento laboral futuro, explicó.

El funcionario abogó para que se tome conciencia de la importancia de una correcta nutrición, pues desatender a la población infantil se relaciona con el futuro de Ecuador.

Para el funcionario, esto equivale a excluir de las oportunidades de desarrollo a la cuarta parte de esta generación.

De su lado, Ana María Larrea, titular de la Setep, señaló que la pobreza es una forma de violación al “derecho de ser ciudadanos plenos”.

En tal sentido, Aráuz anunció que el Gobierno está en proceso de elaborar una canasta normativa que se ajuste a las necesidades nutricionales de la población, en función de lo cual se transformará el aparato de producción y distribución.

El proyecto evitará, además, el excesivo consumo de productos importados que responden a un patrón ajeno a Ecuador, lo que reemplaza a los alimentos locales con alto valor nutricional, señaló.

En el taller organizado por la Senplades y la Setec también se analizó el impacto de la transformación de la matriz productiva para asegurar la soberanía alimentaria, pues conlleva procesos de industrialización del agro.