El sector pide incentivar más el uso del material
Norma regula el uso de caña guadúa en las construcciones
“La caña guadúa es una fuente 100% viable para obtener estructuras completamente habitables, agradables y seguras. Es un tipo de construcción tradicional”, señaló ayer Nicolás Amhaas, viceministro encargado de Desarrollo Urbano y Vivienda.
Durante el seminario de socialización y aplicación de la norma ecuatoriana de construcción sobre estructuras de guadúa, el Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (Miduvi) informó que impulsó un cambio estructural en la política habitacional.
En este sentido, el Miduvi elaboró normas para el desarrollo ordenado de los asentamientos humanos y el acceso a la vivienda.
Esta nueva norma aporta en la construcción de una cultura de seguridad y prevención. Está dirigida al diseño estructural de edificaciones y otras variedades de bambúes.
El principio básico será el diseño sismorresistente de las estructuras, considerando los riesgos a los que se expone Ecuador.
El cuerpo legal garantiza el cumplimiento de aspectos de habitabilidad y salud, y fija responsabilidades, obligaciones y derechos de los actores vinculados a la construcción.
El rector de la Universidad Eloy Alfaro de Manabí, Miguel Camino, considera que la utilización de la guadúa en Manabí debe ser regulada para ser empleada en la construcción a través de permisos y requisitos. “La guadúa es un material noble que es vinculado con la pobreza y la marginalidad, por lo que debe ser rescatado e impulsar su reforestación”, manifestó.
Hace 10 años la frontera agrícola de los guaduales ocupaba 16.000 hectáreas. En 2017 se redujeron a 6.000. Camino considera que reforestar las áreas con guadúa puede resultar una gran reactivación social y financiera en Manabí.
Una caña de 20 o 25 metros de largo sin procesar cuesta $ 1, mientras que la tratada se la puede vender entre $ 6 y $ 7. (I)