Quito y Guayaquil.-

Entre 2008 y 2015 el superávit fiscal permanente del Estado creció 312,5%, pasando de $ 761 millones a $ 3.137,2 millones, respectivamente, según información del Ministerio de Finanzas.

La regla fiscal que se ha utilizado, según el Gobierno, es que los ingresos permanentes (básicamente impuestos) cubran los gastos permanentes (sueldos y gasto corriente), pero con superávit.

Según la proforma del Presupuesto General del Estado (PGE) para 2016, que fue enviada por el Ejecutivo a la Asamblea el 31 de octubre para su aprobación, los ingresos permanentes superan a los gastos permanentes en  $ 5.147 millones, lo que significa el 5,04% del Producto Interno Bruto. Es decir el PIB se estimaría en 2016 en $ 102.426 millones.

DATOS

La asignación a los GAD bajó el 12,1% para 2016; pasando de $ 3.253 millones en 2015 a $ 2.861,8 millones, representa una variación de $ 391,2 millones.

Ecuador ha crecido en promedio 3,9% en los últimos años, frente al  2,9% de los demás países de la región, según indicó el presidente Rafael Correa en su intervención en Manta.

$ 800 millones aproximadamente de libre disponibilidad tendrá el país el próximo año a través del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), según el ministro Rivera.“El país goza de superávit permanente, es decir, la diferencia entre los ingresos permanentes y los gastos permanentes, el 5% del PIB. Esto equivale en contabilidad privada a tener superávit operacional o utilidades, en el caso del sector público significa ahorro, acumulación”, afirmó ayer el presidente de la República, Rafael Correa, durante la sesión solemne por los 93 años de cantonización de Manta.

Ese ahorro se ha movilizado hacia la inversión. “También hemos tenido importante liquidez sin necesidad de movilizar nuestro ahorro, de forma inteligente con reformas institucionales, por ejemplo al eliminar cerca de 2.500 cuentas en el sector público y crear una cuenta única con un promedio de más de $ 1.000 millones”.

La diferencia entre el déficit del superávit permanente con el no permanente da como resultado un déficit global para el PGE de 2,4% del PIB. “La disminución de este déficit sí estuvo programada para 2016 para llegar a un equilibrio (sin déficit) en 2018”, explicó Fausto Herrera, ministro de Finanzas.

Agregó que con los impactos externos, debido a la coyuntura económica internacional, se ha acelerado la baja del déficit, ya que el porcentaje programado inicialmente para 2015 fue de 3,5%.

Con una perspectiva de crecimiento del 1% del Producto Interno Bruto (PIB) para 2016, según la proforma presupuestaria del próximo año, Patricio Rivera, ministro de la Política Económica, explicó que el porcentaje se daría, principalmente, por una potenciación del sector no petrolero.

LEA EL DESGLOSE DE LA PROFORMA PRESUPUESTARIA PARA EL 2016

Focalización de subsidios

El próximo año se aplicará un programa de focalización de subsidios enfocado. El Gobierno recalcó que la medida está dirigida a las personas con mayores recursos económicos.

Aquí se incluye la eliminación de la subvención al diésel industrial por $ 337 millones. Además, se ahorraría alrededor de $ 120 millones por focalización del subsidio eléctrico, enfatizó el Presidente.

Herrera detalló que con un precio estimado de $ 35 por barril de petróleo, los subsidios para el año entrante suman $ 3.196,6 millones.

El subsidio a combustibles abarca el 59% con $ 1.888,1 millones; subsidios a la Seguridad Social (IESS, Issfa e Isspol) se ubica en $ 576,6 millones; subsidio al desarrollo humano (bono de desarrollo social, bono de discapacidades, la pensión de los adultos mayores) $ 621,1 millones; bono agrícola $ 23,8 millones; bono de vivienda $ 49,3 millones; y subsidio de agua cruda $ 34,5 millones.

El ministro Herrera especificó que el subsidio para el transporte urbano se trasladó como competencia a los municipios. Mientras que el transporte interprovincial “ya no necesita la subvención”, porque a inicios de año se dio un aumento de las tarifas. (I)

EE.UU. vende sus reservas de crudo para cubrir déficit

El Departamento del Tesoro reveló que el déficit presupuestario de EE.UU. en este año cayó a su nivel más bajo en 8 años llegando a los $ 439 mil millones, porque decidió vender sus reservas petroleras para reducir el déficit presupuestario, según un artículo publicado por Telesur.

El columnista Jeffry Bartash, en su artículo del portal MarketWatch, dijo que “en momentos en que el mercado mundial está inundado de crudo barato, Washington ha decidido que ahora es el momento perfecto para vender parte de la  Reserva Estratégica de Petróleo (SPR, por sus siglas en inglés) con el fin de reducir el déficit presupuestario de EE.UU.”.

El Congreso y la Casa Blanca acordaron vender hasta 58 millones de barriles de petróleo para recaudar $ 3 mil millones adicionales para el presupuesto del Estado. También se tiene prevista la venta de crudo por otros $ 2 mil millones para modernizar las instalaciones de la SPR, creada hace 40 años como contrapeso a una posible crisis petrolera.

El portal ruso Vesti explicó que “recurrir a las reservas estratégicas de petróleo, en momentos en que los precios están en niveles bajos, demuestra que hay grandes problemas en la economía. Por supuesto, EE.UU. no es el único que recurre a esta medida, muchos países cuyos ingresos dependen del crudo se ven obligados a vender sus reservas para compensar el descenso en su presupuesto. Pero EE.UU. es la mayor economía del mundo y no un pequeño productor de petróleo”. (I)