Comerciantes y distribuidores de licores importados tendrán hasta el 1 de marzo para expender los productos que no cuenten con la etiqueta que exige el Servicio Nacional de Aduana del Ecuador (Senae) para ingresar al país.

El director de ese organismo, Xavier Cárdenas, resolvió dar una prórroga a la disposición vigente desde el 23 de septiembre pasado, y permitir que los licores se expendan con normalidad.

La noticia representó un alivio para algunos expendedores, aunque no están seguros de alcanzar a vender todo el producto que tienen en sus bodegas.

Manuel Zumba, propietario de la distribuidora Drink’s, ubicada en Chimborazo y Manabí, en el sur de Guayaquil, contabilizó en su almacén un total de 101 cajas de licor sin etiquetado, 70 de whisky Grant’s y el resto de productos y marcas variados, lo que suman $ 25.000.

Esta mercadería la venderá hasta por $ 15, aun cuando el precio en el mercado es de alrededor de $ 40.

Zumba expresó que esta prórroga de mes y medio le dará una oportunidad para vender, pero que necesitaría de 3 a 6 meses para deshacerse de todo el licor que tiene en stock.

Doris Arévalo, propietaria de comercial Sánchez-Arévalo, comentó que había devuelto 200 cajas de licor a importadoras como Vinlitoral y Eljuri, bajo la promesa de que se la cambiarán por otra mercadería.

La norma del Senae obliga a que los licores lleguen al país con una etiqueta frontal puesta en origen, con la leyenda ‘Importado por’, más el nombre de la casa comercial en Ecuador.

En un comunicado, el organismo anunció que tanto los controles en lugares formales de expendio, así como los de contrabando, continuarán con regularidad.

LEA LA REFORMA A LA RESOLUCIÓN