En la región crecen los delitos cibernéticos
A escala mundial Ecuador pasó del puesto 51 al 31 en volumen de ataques cibernéticos, tras el retiro a Julian Assange de su condición de asilado en la Embajada ecuatoriana en Londres. Así lo informaron autoridades del Ministerio de Telecomunicaciones el lunes 15 de abril.
Según el reporte, hasta la fecha se han registrado más de 40 millones de ataques cibernéticos, de los 20 millones en promedio que se reciben.
La banca ecuatoriana no es inmune a los ataques cibernéticas, por lo que también implementa diferentes tecnologías y estrategias de prevención y detección de fraude, que son reguladas por la Superintendencia de Bancos (SIB).
Según el Banco Central del Ecuador (BCE) a modo de ejemplo cada día en 2018 se realizaron 290.648 transferencias electrónicas de fondos entre clientes y empresas por concepto de pagos interbancarios.
Este monto es tan significativo que en 2017, los pagos interbancarios equivalieron aproximadamente al 95% del Producto Interno Bruto (PIB). En 2018 se canalizaron en promedio 211.352 transferencias electrónicas diarias por cobros interbancarios.
David López, vicepresidente de ventas para América Latina de Cyxtera Technologies, indicó que la regulación de Ecuador habla de implementar tecnologías que permitan monitorear la exposición de un banco en internet para detectar incidentes fraudulentos y proceder a su desactivación.
Tecnologías que permitan analizar el riesgo de las transacciones a través del conocimiento de los hábitos de los cuenta habientes y desarrollar alertas según las mismas.
Seguridad cibernética en la banca ecuatoriana
López destacó al Banco del Pacífico que decidió emprender una estrategia por la seguridad luego de haber sufrido casos de phising o suplantación de canales digitales de un banco para engañar al cliente y conseguir su información. “Es el principal tipo de fraude en Ecuador y en la región”, indicó.
El sistema que usa Banco del Pacífico es el Detect Safe Browsing que crea una atmósfera que motiva a los clientes a realizar sus transacciones en línea de forma flexible y transparente.
Otra entidad cuyos canales móviles cuentan con certificados de encriptación que garantizan la integridad y confidencialidad de las comunicaciones con los clientes es Banco ProCredit.
“Se evalúan las vulnerabilidades tecnológicas y las transacciones son aprobadas mediante métodos de autenticación fuertes”, señaló Gustavo Urquieta, oficial de Seguridad de Banco ProCredit.
La entidad, así como otras instituciones financieras, han experimentado un incremento en el intento de fraudes electrónicos mediante compras en internet. “Durante el último año, recibió menos de cinco reclamos formales acerca de delitos cibernéticos”.
Por su parte, Banco Pichincha cuenta con un centro de Monitoreo de Transacciones donde se revisan aproximadamente 500 millones de movimientos al año.
El centro utiliza herramientas de última generación que incluyen modelos de inteligencia artificial, que le permite prevenir la mayoría de los ataques dirigidos a los clientes.
Cuando una transacción no autorizada o fraudulenta es detectada, “nuestros sistemas bloquean los usuarios, tarjetas y claves de acceso comprometidas y de esta forma evitan que el atacante logre su cometido” indicó Juan Carlos Beltrán, gerente de Riesgo Operativo.
En 2018, los reclamos, por transferencias fraudulentas equivalieron al 0,1 por mil del total de transferencias procesadas.
David López advirtió que la evolución del fraude electrónico es fuerte debido a la transformación digital en la que vivimos. Se debe prestar más atención a los temas de seguridad, los retos están en asegurar las operaciones desde cualquier sitio. (I)