Ayer culminaron las negociaciones entre la Unión Europea y Ecuador, en Manta (provincia de Manabí), con un posible cierre en temas de acceso al mercado, pero con la expectativa de un acuerdo que viene con el tiempo en contra, tanto por las elecciones del parlamento europeo en mayo, como por el vencimiento del Sistema General de Preferencias (SGP Plus) en diciembre, para lo cual Ecuador busca salidas.

El ambiente en el Hotel Oro Verde fue de igual hermetismo que en los días previos; sin embargo, se esperaba la llegada del titular del Ministerio de Comercio Exterior, Francisco Rivadeneira, para reunirse por la noche con los Jefes Negociadores de Ecuador y la UE, Roberto Betancourt y Matthias Jorgensen, respectivamente.

OTRO MERCADO SE ABRIRÍA POR VÍA DIPLOMÁTICA

El ministro de Comercio Exterior, Francisco Rivadeneria, expuso el miércoles los beneficios del Acuerdo de Cooperación Económica, Comercial y Técnica entre Ecuador y Qatar, ante la Comisión Especializada Permanente de Soberanía, Integración, Relaciones Internacionales y Seguridad Integral de la Asamblea Nacional.Dicho documento se suscribió durante la visita del Emir de Qatar, Hamad Bin Khalifa Al Thani, en febrero de 2013.
 El titular de la cartera de Estado destacó que con países del Medio Oriente, como Qatar, no es necesario tener acuerdos comerciales, pues por sus condiciones climatológicas y su gran poder adquisitivo (Qatar tiene el PIB per cápita PPA más alto del mundo), importan el 95% de sus alimentos. Requieren entonces de socios estratégicos como Ecuador, que tiene la capacidad de proveer varios de los mejores productos agroindustriales del planeta.

Temprano en Quito, Rivadeneira adelantó que la negociación fue dura "como es normal", pero que se logró avanzar en algunos temas de interés para el país.

Recalcó, no obstante, que es muy temprano para sacar conclusiones pues, según lo previsto, las mesas técnicas cerraban anoche y la evaluación del trabajo se realizará en el transcurso de la mañana. El funcionario ofreció pronunciarse al mediodía sobre avances puntuales.

En tanto, la Federación de Industriales del Ecuador sesionó ayer en el puerto manabita para tratar, entre otros temas, las negociaciones de Ecuador con el bloque comercial.

Roberto Aspiazu, principal del Comité Empresarial Ecuatoriano (CEE), dijo que ha mantenido conversaciones con funcionarios del gobierno presentes en las reuniones y que, según lo trascendido, las mesas de acceso a mercado para bienes industriales y agrícolas "estarían cerca de cerrar", pues las sensibilidades han quedado reducidas en vista de que ambas partes plantean exclusiones para distintos tipos de productos.

En el caso de Ecuador se trata de carnes de res, pollo y cerdo, así como maíz. Así también, mencionó que el tema de servicios estaría igual de avanzado. Recordó que Colombia y Perú cerraron un acuerdo con exclusiones de 50 subpartidas arancelarias. Aspiazu confía en que en esta ronda se puedan cerrar de una a dos mesas de las cinco, de modo que el escenario de un acuerdo se sienta más próximo.

Siguientes rondas

Según Rivadeneira, se necesitarán "mínimo" dos rondas más; la siguiente sería en mayo en Europa -no precisó que sea en Bruselas-, y la última en Ecuador, en julio.

"Los temas difíciles son los que van quedando para el final, pero son pocos los pendientes", aseguró Roberto Aspiazu.

El empresario explicó que normalmente estos se resuelven a nivel de jefes negociadores porque se lo hace a una instancia política, ya que los equipos técnicos no tienen la potestad para tomar decisiones.

En tal sentido, el ministro Rivadeneira mencionó que ha tenido todo el respaldo del presidente Rafael Correa para avanzar en el proceso. "Y si es que se aceptan y si se dan las circunstancias y los contenidos adecuados, podemos cerrar entre junio y julio”, aseguró.

Plan de contingencia

El escenario de un acuerdo con la UE urge para el sector industrial, aseguró Henry Kronfle, presidente de la Cámara de Industrias de Guayaquil, considerando el vencimiento del SGP Plus y el cambio en el parlamento europeo.

Sobre este último punto, explicó que la política europea implica la aprobación en conjunto de los parlamentos de los países miembros pues se refiere a un trato no solo comercial sino también social y de cooperación política, en el que entran aspectos incluso como el de derechos humanos. Por otro lado, es un hecho que finalizan las preferencias arancelarias en diciembre.

Kronfle mencionó que es prematuro pensar en esto, pero dejó en claro que podría pensarse en un plan de contingencia en caso de que la transición en el parlamento genere un obstáculo para la entrada en vigencia de un acuerdo y que hasta aquello culminen las preferencias.

De acuerdo con Rivadeneira, todo gobierno responsable debe tener un plan B y señaló que se ha pedido de manera sistemática, inclusive antes de empezar a negociar, la extensión del sistema de preferencias SGP Plus. “No hay una respuesta todavía, pero sería de manera temporal hasta que lo apruebe el parlamento europeo de manera provisional", dijo.