La ministra Coordinadora de la Producción, Nathalie Cely, concluyó ayer una visita a Israel que le ha permitido profundizar en el conocimiento de las ventajas y carencias en la relación comercial entre ambos países.

“La visita me ha permitido mirar sobre el propio terreno las posibilidades de complementariedad que hay entre Ecuador e Israel”, declaró Cely en entrevista con agencias de noticias internacionales.

La responsable ecuatoriana encabezó ayer en Tel Aviv un evento organizado por la Embajada de Ecuador en Israel y la Cámara de Comercio Israel-América Latina, con el objetivo de aumentar los intercambios comerciales y la inversión entre ambos países.

Cely, quien se ha entrevistado durante su estancia con representantes del sector privado, de cámaras de comercio, y Cámara de Comercio de Israel para América Latina, considera que hay muchos ámbitos en los que se pueden desarrollar las relaciones bilaterales. Subrayó con especial interés los “temas relacionados con la tecnología e innovación, turismo y comercio”.

La funcionaria se refirió a la hasta ahora desequilibrada balanza comercial entre los dos países, con exportaciones del Ecuador que no llegan a los 5 millones de dólares, mientras que las israelíes se sitúan en los 19 millones de dólares. Y afirmó que uno de los objetivos de la visita fue animar a sus homólogos israelíes a que “se revise la cuestión tarifaria”, debido a los aranceles económicos que pone Israel a algunos productos ecuatorianos, medida que por el contrario  no se ve reflejada en Ecuador.

“En nuestro caso, nosotros importamos de Israel bienes de capital, que la mayor parte tienen cero arancel, mientras que nosotros tenemos ciertas barreras arancelarias que deberíamos tratar de rebajar, como en las flores o elaborados de frutas, jugos y concentrados”, dijo Cely.

Durante su estancia en Israel, iniciada el pasado 28 de mayo, la secretaria de Estado  también participó en la Conferencia Internacional de Mujeres Líderes 2011, en la ciudad septentrional de Haifa.

El evento, celebrado entre el 29 de mayo y 3 de junio, estaba organizado por el Centro Internacional de Capacitación Golda Meir de Monte Carmelo, con el auspicio de la Agencia para el Desarrollo de la Cooperación Internacional de Israel (Mahav), y en colaboración con la Unesco.

Entre los participantes figuraban también la directora general de la Unesco, Irina Bokova; la científica israelí Ada Yonath, Premio Nobel de Química en 2009; y la secretaria general adjunta de la ONU, Asha-Rose Migiro.