El 45% de la leche que acopia Floralp, una de las industrias de lácteos más importantes del mercado ecuatoriano, proviene de 1.000 pequeños ganaderos que -gracias a un Negocio Inclusivo- se han convertido en proveedores estratégicos de esta importante empresa.

La firma aplicó la estrategia de Negocios Inclusivos para incluir en su cadena de valor a pequeños productores de las provincias de Carchi, Imbabura y Pichincha, con la finalidad de crear una sólida red de proveeduría.

Los agricultores beneficiados recibieron asistencia técnica, tecnología y acceso al financiamiento a través de esta iniciativa que es parte del Programa Regional de "Negocios Inclusivos: Ganamos Todos", de la alianza entre SNV, institución experta en temas de inclusión a nivel mundial y el Fondo Multilateral de Inversiones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID-FOMIN).

En el Negocio Inclusivo se invirtió $ 120.885, financiados entre el BID-FOMIN por un valor de $68.760 (57%) y la empresa Floralp, por un valor de $ 52.125 (43%).

Las capacitaciones del Negocio Inclusivo tuvieron el fin de mejorar la calidad de la leche, nutrición, sanidad y crianza del animal, así como el manejo de pastizales, costos de producción, manejo de registros, nutrición humana y control financiero.

Con ello se logró que los 1.050 beneficiarios agrupados en 16 asociaciones aumenten su producción de leche. Actualmente entregan 30.600 litros de leche al día, lo que contribuye a que la empresa aumente su productividad e impacto de ventas en 5%, resaltó Gabriel Araujo Velasco, jefe de Fomento Ganadero de Floralp.

Además, a los pequeños productores se les garantiza precios justos y estables en un mercado seguro y con capacitación permanente.

Así lo confirma Oswaldo Benavides, productor y secretario de la asociación ganadera “Los Rancheros del Norte”, uno de los beneficiarios del Negocio Inclusivo, quien empezó produciendo 60 litros diarios hace un año y medio y ahora produce 150 litros por día.

“Pienso producir más en los próximos años. Ahora nos podemos proyectar porque tenemos un mercado seguro. Antes de integrarme tenía ingresos de 450 a $ 500 mensuales, ahora llego a recibir un promedio de $ 1.000 a $  1.200”, afirma el beneficiario.

Asimismo, el representante de la alianza que asesora y cofinancia esta iniciativa, Roberto Garcés, quien es coordinador en Ecuador del Programa Regional de Negocios Inclusivos: Ganamos Todos, sostuvo que el éxito de esta experiencia se debe a la fuerte vinculación existente entre la empresa y los pequeños productores. “Ha sido importante que Floralp considere las políticas de inclusión como punto central de su estrategia organizacional.

Además, el Negocio Inclusivo ayudó mucho en fomentar la asociatividad de los pequeños productores”, enfatizó Garcés. Por su parte Araujo destacó que gracias al Negocio Inclusivo, Floralp recibió reconocimientos nacionales e internacionales, los que destacaron su gestión de Responsabilidad Social Empresarial.