Ecuapass, de los “más modernos de la región”
La Organización Mundial de Aduanas (OMA) es la única organización intergubernamental enfocada exclusivamente en las cuestiones aduaneras. La OMA es reconocida como la voz de la comunidad mundial en este sector. Su sede está ubicada en Bruselas, Bélgica.
El sistema aduanero en el mundo maneja estándares y reglamentos internacionales totalmente diferentes. La cooperación entre países se genera como una medida de apoyo para facilitar el acceso al mercado mundial y combatir actividades o acciones ilícitas que perjudiquen el comercio exterior.
Estos, entre varios temas, los analizó Sergio Mujica, secretario adjunto de la Organización Mundial de Aduanas (OMA), en diálogo con diario EL TELÉGRAFO.
¿Qué ha realizado la OMA para asegurar el mayor grado de simplificación, armonización y estandarización de procesos aduaneros para facilitar el comercio?
Tenemos una estructura de funcionamiento bastante compleja. La sede de la OMA es en Bruselas y las principales decisiones de tipo político, de dirección, las da el Consejo, que se reúne una vez al año con la presencia de todos los directores de aduanas del mundo.Existe, además, una instancia que se llama “la comisión política” que se reúne dos veces al año para establecer todos estos direccionamientos.
Adicionalmente, existen muchísimos comités de tipo técnico. Por ejemplo, en materia de nomenclatura hay un comité del sistema armonizado donde los países (sus técnicos especialistas) actualizan y modernizan el sistema armonizado para responder a los cambios que se producen a nivel mundial. También hay comités de fiscalización y control en donde vienen todos los expertos en esta área y coordinan sus procedimientos, intercambian información, etc. Es una plataforma donde vienen los expertos a nivel mundial y llegan a acuerdos.
Después de los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos, se propuso que los contenedores que lleguen a este país pasen por un proceso de escáner. ¿Cómo ve la OMA este planteamiento?
Con el atentado a las Torres Gemelas se generó un cambio de eje grande a nivel global para la aduana, agregando entre sus funciones la seguridad. Esta ley todavía no entra en aplicación porque ya se postergó una vez. Como organismo, creeemos que el 100% de revisión no es la mejor manera de responder a este desafío, porque nosotros creemos en una manera distinta de trabajar, y que se llama gestión de riesgos, la cual se opone a este concepto de control.
¿Es una ley exagerada?
Más que exagerada, yo diría que es equivocada, porque aplica una estrategia que no es compatible con lo que nosotros establecemos como una mejor táctica internacional. Nuestra táctica es la gestión de riesgos, es decir, del 100% de las operaciones, identificar a aquellas que representan un mayor riesgo y al resto darles facilidades. Una ley que obliga a controlar el 100% crea una falsa apariencia de seguridad y no permite distinguir ni buscar el verdadero riesgo, sino que lo revisa todo; eso, además, sería una traba al comercio.
¿Qué aspectos son necesarios para la cooperación aduanera?
Necesitamos cooperar en tres aspectos fundamentales: primero, la definición de estándares y regulaciones internacionales.Esto es lo que llamamos el verdadero lenguaje internacional de la aduana, porque de una parte hay un importador e inevitablemente en la otra hay un exportador. Es importante que todos los países nos pongamos de acuerdo sobre cómo funcionan las cosas o cómo las vamos a valorar.
La segunda es servir de plataforma para la cooperación internacional. Hay que conectarse con otras aduanas, con otros organismos asociados al comercio internacional en temas de agricultura, salud, migraciones, Policía, etc. Es necesaria también la cooperación con el sector privado. La tercera posición es el fortalecimiento de capacidades. Si hacemos estándares y regulaciones internacionales, estas no sirven de nada si están guardadas en el armario, sino que tienen que aplicarse.
En el tema de intercambio aduanero, ¿cuáles son los resultados que se han obtenido en estos últimos años?
Son muy variables. En materia de intercambio de información aduanera existen cosas en donde todos estamos de acuerdo en el concepto, pero al momento de aplicarlo hay muchas diferencias. Hicimos una encuesta a todos los países, en donde preguntamos si les gustaría recibir información de otras naciones y la respuesta unánime fue que sí, pero, en la segunda pregunta: ¿Estaría usted dispuesto a enviar información a otros países?, ahí fue donde encontramos los problemas, porque o no tienen el marco jurídico para hacerlo o no tienen la parte técnica o informática para lograrlo.
En el caso del Mercosur hay un sistema donde los oficiales de aduana acceden directamente en las declaraciones de los otros países miembros. Esa plataforma informática se está expandiendo a otros países y ya está en Bolivia y Chile. Hasta el propio Ecuador va a empezar a aplicarlo en unos meses, como parte de un proyecto piloto liderado por la OMA en colaboración con Mercosur.
Tenemos también un acuerdo de cooperación entre editores nacionales de aduana de Latinoamérica, España y Portugal. En ese convenio, se establecen mecanismos de intercambio de información y de alertas, es decir, si por ejemplo se identifica una mercancía que puede tener cierto riesgo, lo que hago es comunicarme con el país, para que se hagan los controles que corresponden.
¿Cómo ve la OMA la aplicación del sistema informático aduanero del Ecuador, Ecuapass?
El Ecuapass hay que mirarlo dentro de un contexto mucho más amplio, y que tiene que ver con el proceso de modernización de la aduana en general. Es uno de los procesos de modernización más potentes que hemos visto en la región, además de que es bastante integral. La modernización es una forma de trabajar, de enfrentar los cambios globales que están ocurriendo permanentemente y de adaptarse a la cultura del cambio.
La OMA es la única organización intergubernamental enfocada en las cuestiones aduanerasEl proceso hecho en Ecuador abarca todos los elementos más importantes de una aduana nueva, partiendo por lo regulatorio, cuando sacaron el Código de la Producción, donde incluyeron una nueva regulación para las aduanas, que es totalmente compatible con el principal instrumento internacional que tenemos nosotros en materia de procesos aduaneros.
Lo del Código de la Producción pasó hace más de un año y lograron compatibilizar toda su legislación a este convenio internacional, por lo tanto, ustedes ya estarían en condiciones de acceder al convenio, si es que así lo requieren.
En materia de estructura organizacional y de recursos humanos, ustedes tienen un equipo directivo de lujo, de primera, con gente joven, bien preparada, con mucho entusiasmo y mística. Ninguna modernización funciona si no es con compromiso de los funcionarios, si no entienden el proceso de cambio, si no saben usar las nuevas herramientas.
En lo tecnológico han invertido bastante en sistemas de revisión y en modificar su sistema informático para la operación de comercio exterior. Ecuapass es uno de los procesos mas ambiciosos que he visto, donde existe una plataforma informática nueva, que abarca todos los procesos aduaneros.
¿Cuáles son los cambios que se han dado a nivel regional?
Yo diría que se está avanzando a velocidades diferentes. Como es lógico, hay algunos procesos que han sido más exitosos y otros más lentos. Una de las áreas donde creo que hemos tenido avances significativos como región es el de la ventanilla única. A nivel global, Latinoamérica ha desarrollado sistemas de ventanilla única bastantes sólidos, partiendo por Ecuador. Lo segundo en lo que la región ha progresado es en lo que se denomina gestión de riesgos. La gestión tiene una gran aplicación práctica, porque si la vemos 30 años atrás, las aduanas que mejor tasaban eran las que revisaban el 100% de las operaciones.
Nuestra gran tarea como aduana es facilitar el comercio por un lado y controlarlo al mismo tiempo. La principal herramienta es la gestión de riesgos, en donde se analizan las operaciones, es decir, conocer de dónde viene un producto, a dónde va, quién está importando, exportando, qué rutas siguen, etc., determinar qué es lo que representa y luego dirigir mi control solo a aquello que presenta riesgo.
¿Cuáles son las ventajas de la ventanilla única?
En una operación de comercio exterior pueden intervenir hasta veinte servicios públicos y no solo la aduana. A veces pueden estar involucrados áreas de agricultura, salud, o la autoridad pesquera haciendo certificaciones, distintos tipos de autorizaciones. Es una situación sumamente compleja en ambos sentidos de la palabra, porque intervienen múltiples actores. Entonces, la ventanilla única consiste en consolidar todos estos distintos procesos en un solo lugar. Lo importante aquí es la coordinación.
En el caso de Ecuador, por mandato presidencial, hace unos dos o tres años, se estableció un proyecto de ventanilla única que se ha logrado aplicar con éxito. Pero esto no solo se implementó aquí, sino también en Colombia, donde tienen una ventanilla única bastante exitosa. En Chile se está desarrollando, lo mismo en varios países de Centroamérica, entonces es un área en donde la región ha avanzado muy bien.
¿Qué se está haciendo para combatir el contrabando aduanero en la región?
Medir el contrabando es una cosa prácticamente imposible, porque los indicadores para medirlo pueden sonar contradictorios y no necesariamente representan una buena fotografía de la realidad. Lo que a nosotros nos importa es establecer los mecanismos de control y responder a los mejores estándares internacionales, como el sistema de gestión de riesgos.
La entidad reúne
a 179 países, que representan prácticamente el 99% del comercio mundialEsto permite coordinar una buena actividad de inteligencia detrás de todo esto, trabajar con los respectivos actores públicos involucrados porque a veces eso es responsabilidad de la Policía en algunos países. Permite ver también, por ejemplo,cómo coordino con los actores privados en materia de propiedad intelectual. Esas son las herramientas más efectivas, más allá de hacer una medición.
¿Qué es la declaración de Columbus y qué se ha logrado en eso?
A raíz del atentado de las Torres Gemelas, hubo una respuesta multilateral de las aduanas a nivel global y se aprobó el marco normativo SAFE. Este marco establece dos pilares: uno es el de la aduana con el sector privado y el otro es aduana-aduana. Esos dos pilares establecen 17 estándares internacionales y, para aplicarlos, hay que fortalecer capacidades, según los roles fundamentales de la aduana. Nosotros necesitamos que esos estándares se apliquen en la vida real, sobre todo en los países en desarrollo.
Y en ese marco surge el programa Columbus, que colabora con los países para que puedan implementar el marco normativo SAFE. El programa Columbus está compuesto de tres fases: la fase 1, que es de diagnóstico, donde vienen expertos de la OMA a los países y hacen un análisis para ver qué tan lejos o qué tan cerca estamos para aplicar esos estándares.
La fase 2 es el plan de acción o el plan estratégico, que permite identificar todas las debilidades para luego transformarlas y que así exista un cumplimiento pleno del marco normativo SAFE. Y la fase 3 es de retroalimentación, es decir, se analiza todo este proceso hecho en el pasado y se plantean los ajustes que se podrían hacer. El programa SAFE tiene una gran aceptación a nivel global, 160 países se han comprometido a aplicarlo, entre ellos Ecuador.
¿Cuál es la importancia de la logística en el comercio exterior?
Es fundamental. En esto, la logística no puede hacerse solo con el sector público, sino también con el privado. En una operación de comercio exterior participan las aduanas, participan otros organismos del sector público, pero también intervienen muchos actores del sector privado, como los operadores logísticos, gente de carga, las navieras, los puertos, etc. Esta cadena logística tiene que atenderse de una manera integral, es decir, no basta que cada uno de sus eslabones funcione bien, es necesario que una cadena como tal, en su totalidad, sea eficiente y segura.
¿Qué opina de la creación del reciente Ministerio de Comercio Exterior en Ecuador?
Es una idea muy interesante, porque permite tener la mirada global de la cadena logística que va más allá de la operación particular ya que también permite coordinar de buena forma a los distintos organismos que intervienen en esta cadena.