Distribuidores de combustibles se quejan por pérdidas
Las pérdidas que generó a las estaciones de servicio el dejar sin efecto el Decreto Ejecutivo 883 es una de las preocupaciones de las personas que trabajan en este sector.
Esta y varias de sus necesidades se tratarán en la Asamblea Nacional de Distribuidores de Derivados de Petróleo del Ecuador que se lleva a cabo este viernes 18 de octubre de 2019, en Quito.
Fernando Moreno, representante de la Cámara de Distribuidores de combustibles de Cotopaxi, aseguró que en esta provincia hay alrededor de 40 gasolineras y muchas de ellas no pudieron recibir ni vender la gasolina que ya habían comprado con los precios sin subsidio debido al paro.
Finalizadas las paralizaciones llegó el combustible y empezaron a venderlo pero a precios bajos. “Tenemos unas pérdidas enormes por la baja de precios que son de alrededor de $ 300.000”.
Carlos Salazar, presidente de la Cámara Nacional de Distribuidores de Derivados de Petróleo del Ecuador, comentó que el sector propone que el incremento de los combustibles, que tiene que darse ya desde hace varios años, sea de forma gradual y así eliminar los subsidios en un par de años sin que se genere un alto impacto social.
Por ejemplo, Salazar aconseja subir $ 0,05 mensualmente para que al cabo de un poco más de dos años se tenga el precio real.
Salazar considera también que otra opción es que se registre a los beneficiarios de los subsidios para que se les devuelva al mes siguiente a través de SRI el impuesto con la presentación de las facturas.
El representante del sector aseguró que desde hace varios años se ha pedido que se transparenten los valores de los combustibles porque “son más de 17 años que no se mueven los precios en cuanto al diésel, extra o eco país”.
Según Salazar, el sector tienen entre un 8% y 10% de margen bruto de ganancias, pero después de cumplir con todos los gastos les queda alrededor del 2% de utilidad, “que es muy baja para la inversión y el trabajo que este sector realiza”.
Asegura que en el país hay alrededor de 1.180 estaciones de servicio. En cada una trabajan entre 15 a 20 personas. (I)