El sector agroindustrial tiene altas expectativas de que las conversaciones comerciales entre Ecuador y EE.UU. lleguen a buen término para aumentar la competitividad y productividad del país.  

En el corto plazo se espera que rosas, atún en funda (pouch), brócoli y alcachofas ingresen al Sistema General de Preferencias (SGP). Este fue un pedido directo del presidente Lenín Moreno a su par, Donald Trump, en su cita de la semana pasada.   

Los tres primeros productos sí ingresan al mercado estadounidense pero con carga arancelaria.

Al incluirse en el SGP estas se reducirían o se eliminarían. Estos aranceles hacen que Ecuador pierda competitividad frente a otros exportadores como Perú y Colombia, que además mantienen un acuerdo comercial con EE.UU., indicó el ministro de Producción, Iván Ontaneda.

El atún en funda, por ejemplo, ingresa con dos tipos de aranceles. Si contiene agua se lo grava con el 12,5% y con aceite, el 35%.
“Con una negociación se aliviaría el pago de estos aranceles”, comenta Mónica Maldonado, directora ejecutiva de la Cámara Ecuatoriana de Industriales y Procesadores Atuneros.

Según sus datos, Ecuador produce alrededor de 500.000 toneladas al año en lomos precongelados y conservas en vidrio y funda. Esto representa unos $ 1.300 millones. De este monto, un 60% se exporta a la Unión Europea y alrededor del 16% a Estados Unidos.

Bruno Leone, presidente de la Cámara Nacional de Pesquería, explica que en 2019 se exportaron a ese país $ 105 millones de atún en funda. Recuerda que cuando estaba en vigencia la Ley de Preferencias Arancelarias Andinas y Erradicación de la Droga (ATPDEA), este producto entraba libre de aranceles a EE.UU.

En ese entonces se llegó a exportar hasta $ 160 millones. Pero desde que Ecuador dejó el ATPDEA el mercado del atún empezó a deteriorarse. Lo mismo sucedió con la alcachofa.

Desde 2013 este vegetal se dejó de comercializar debido a los aranceles que debía pagar para ingresar a EE.UU. De llegar a un acuerdo se podría reactivar esta actividad.

Daniel Legarda, presidente ejecutivo de la Federación Ecuatoriana de Exportadores, explica que para que los productos formen parte del SGP se debe seguir un proceso.

Tanto Legarda como Ontaneda esperan que este proceso concluya dentro de esta administración del país. El ministro de Finanzas, Richard Martínez, dijo que una entrevista televisiva podría tardar hasta el primer semestre de 2020.

Para Felipe Espinosa, director ejecutivo de la Cámara Ecuatoriano Americana, el SGP es una ayuda inmediata mientras se firma un tratado comercial. Explica que este sistema está sujeto a la voluntad del gobierno de turno y no se han incluido nuevos productos desde 2013. Por ello, coinciden todos, la solución a largo plazo es la firma de un acuerdo comercial entre ambas naciones.

Eso está en la mira del Gobierno Nacional y el ministro Ontaneda confirmó que el 15 y 16 de abril vendrán al país altos representantes del departamento de Comercio de EE.UU. (USTR por sus siglas en inglés) para establecer una agenda con los plazos concretos para encaminar el acuerdo.

Frente a esta reunión, Espinosa considera que hay que ser “optimistas pero cautos”.

La negociación todavía tomará un tiempo, pero la voluntad política y la visita de la delegación a EE.UU., que incluyó a 49 representantes del sector privado, dejó abiertas varias oportunidades para Ecuador. (I)