Ecuador emplea el 25% de normas regulatorias
A medida que Ecuador avanza en su más ambicioso reto de transformar la matriz productiva para generar mayor valor agregado a la producción, despeja el camino de potenciales problemas que podría atrasar el proceso.
Los aspectos regulatorios deben ser suficientemente amplios para proteger la industria nacional de las vulnerabilidades externas.
El sistema sirve para generar certeza jurídica, disminuir las importaciones de varios productos que son esenciales para desarrollar mayor producción, ahorrar recursos energéticos, modular la demanda y el consumo nacional y alcanzar una economía de escala.
También protege la salud de los habitantes, el momento en que una norma prohíbe el ingreso al mercado nacional, procedentes del exterior, de juguetes u otros objetos elaborados con pintura de plomo que generan enfermedad o ciertos grados de intoxicación, principalmente en los niños y niñas, que pueden verse afectados su cerebro y sus nervios en desarrollo.
Ecuador tiene un déficit regulatorio que lo convierte más en consumidor que en productor de normas, porque utiliza únicamente el 25% de esa facultad, admite el Instituto Nacional de Normalización (INEN).
Ecuador tiene 2.883 normas, frente a 4.988 de A. Latina y África, 11.031 de Asia y 27.374 de EuropaHasta el momento, Ecuador cuenta con 2.883 normas frente a 4.988 de América Latina y África, 11.031 de Asia y 27.374 de Europa, lo que preocupa al presidente de la República, Rafael Correa, quien dispuso a las autoridades trabajar en una agenda que haga posible el cambio, bajo la dirección de la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo (Senplades).
Se espera que en las próximas semanas estén listas las regulaciones para contratación pública y banca pública, a la par que se elaboran otras normas de calidad que regirán en los sectores de la economía. “La agenda completa corresponde a una serie de disposiciones que se implementarán hasta finales de este año”, señaló Andrés Aráuz, subsecretario de Inversión Pública de la Senplades.
Entre los instrumentos de regulación administrativa por utilizarse están acuerdos ministeriales, decretos, reglamentos, leyes, contratos de inversión, concesión, explotación y contratación pública.
Senplades anunciará, en los próximos días, las regulaciones que regirán en la economía nacionalTambién hay esquemas de regulación económica; es decir, requisitos de desempeño, normas de conducta, relación con la cadena de valor y el tema de interculturalidad, porque Ecuador es un país de varias nacionalidades.
Ya en los mismos contratos, el vicepresidente de la República, Jorge Glas, informó que se regula el trabajo de los ecuatorianos. Por ejemplo, en la construcción de un megaproyecto hidroeléctrico, los directivos tienen la obligación de contratar mano de obra disponible no calificada en la zona que se ejecutan los trabajos; comprar y contratar los servicios de transporte en las comunidades del área, así como la alimentación.
Matriz productiva
Para el efecto se anunció la creación del Comité de Cambio de la Matriz Productiva para que impulse el proyecto regulatorio y tenga el control y coordinación con las diversas instituciones ejecutoras, como el INEN, Agencia Ecuatoriana de Aseguramiento de la Calidad (Agrocalidad), los consejos nacionales de Electricidad y Telecomunicaciones, el Instituto de Propiedad Intelectual (IEPI), el Instituto de Compras Públicas, el Ministerio del Ambiente, las agencias, juntas de regulación, entre otras.
Descartó que el esquema sea una camisa de fuerza, sino más bien posibilita la entrega de incentivos. De hecho se realiza un análisis para ver la posibilidad de incrementar el fondo de garantía de la Corporación Financiera Nacional (CFN), con el objetivo de otorgar la mayor cantidad de créditos, pero “siempre que favorezca a los objetivos principales de la matriz productiva”.
Según Glas, el país subutiliza su capacidad regulatoria, porque no hay las suficientes normas que protejan o favorezcan a la economía, ni la salud de los ecuatorianos. Tampoco hay normas ambientales estrictas que prohíban la importación de motos que provocan ruido y contaminación, al igual que vehículos que consumen más gasolina o las refrigeradoras que gastan más energía eléctrica.
Para el personero no solo hay que regular la oferta de servicios, sino también la demanda energética de los ecuatorianos para alcanzar una economía de escala, y proteger así la producción nacional, fortalecer la industria y generar mayor competitividad y productividad.
Mientras tanto, Aráuz anunció que la Senplades realizó un estudio para determinar la capacidad regulatoria del Estado, en el que se resalta la importancia que la Constitución da a esa facultad.
Se encontró que muchas entidades programan proyectos de inversión, como único mecanismo de solución a los problemas de los ecuatorianos, pero no encaran el aspecto de normalización.
En ese sentido, el funcionario confirmó que el equipo, que integra el comité, tendrá como misión fortalecer el sistema de organización de manera más acelerada. Sin embargo, Glas hizo una observación de la “deficiencia del Estado” al utilizar apenas el 25% de la capacidad del sistema. Las empresas públicas también ejercen sus propias acciones, a través de la competencia. Tal es el caso de la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT) cuyos precios de los servicios de banda ancha de Internet bajaron de 80 dólares mensuales que cobraban las empresas privadas a 16, cuando ingresó al mercado la entidad pública.
Aprobación de normas
El INEN avanza en la redacción y aprobación de normas para garantizar la calidad de elementos fabricados, la seguridad de funcionamiento y el trabajo con responsabilidad social.
Los sectores estratégicos que se someten de forma prioritaria a un diagnóstico por parte del INEN son: alimentos frescos, la cadena agroforestal, metalmecánica, petroquímica, farmacéutica, la biotecnología y software, las energías renovables, los servicios logísticos y el turismo.
Por lo pronto, el INEN recibirá el apoyo de la Organización Internacional de Normalización durante dos años, con lo cual se espera fortalecer los procesos de desarrollo de capacidades normativas, que contempla la generación de normas técnicas y la adopción de otras establecidas a escala internacional.
El ministro de Industrias y Productividad, Ramiro González, anunció que uno de los objetivos trazados por esta cartera de Estado es darle un impulso fundamental al Instituto, para que las normas vigentes y las que se expidan se conviertan en el eje fundamental del cambio de la matriz productiva. “No es posible que en el país se dé incentivos a sectores industriales que no dan importancia a la calidad de los productos. Se ayudará en los procesos productivos y, sobre todo, que las importaciones que ingresen al país sean de óptima calidad”, acotó.