Diana Vizcarra, Jéssica Piedra y Karina Navarrete no dieron tregua ayer en la competencia de triatlón femenino de los IV Juegos Nacionales Absolutos.

Las capitalinas arribaron a la meta pasada la hora y media, tras haber nadado 1.200 metros en la Piscina Olímpica, pedaleado 31 kilómetros y corrido 7.200 metros por la Avenida 12 Abril, a las afueras del Coliseo Mayor Jéfferson Pérez.

Al inicio la triatleta azuaya María Cristina Farez tomó la delantera; fue la más rápida en el agua, por lo que fue la primera en salir a pedalear.  

Sin embargo, un objeto sobre la calzada le ponchó una llanta a la deportista local; lo que  le quitó alrededor de cinco minutos, tiempo  que Vizcarra, Piedra y Navarrete aprovecharon para superarla y ponerse en frente de la prueba  a falta de siete vueltas para que terminara.  

Farez, con ayuda de su cuerpo técnico, repuso el inconveniente y de inmediato retomó su camino hacia la meta. Pese a los 500 metros que le sacaron las pichinchanas, el aliento de cientos de cuencanos que  observaron la carrera en las calles, le gritaban: “¡Vamos María, tú puedes... sigue apretando!”. Ante ese respaldo, Farez cogió fuerzas y en la décima vuelta (eran trece) acortó distancia con la tercera de Pichincha (Navarrete). Pero  el  esfuerzo  de  Farez  fue  inútil.

En varones, el  azuayo  Juan  Andrade se quedó con el oro,  tras cronometrar 1 hora, 35 minutos y 33 segundos. Giovanni   Mármol, de  Pichincha, fue segundo.