Al brasileño Joao Souza le viene bien jugar en la altura, no hay duda. El tenista de 24 años se consagró campeón del XVIII Challenger de Quito en los 2.800 metros de la capital. Pero este no es el primer título del paulista a miles de metros sobre el nivel del mar, ya que tiene además otros dos en su haber, ambos alcanzados en Bogotá, Colombia, ciudad con una altitud de 2.600 m.

Souza ya había dejado una grata impresión en la arcilla capitalina en 2010, cuando en su primera vez en Quito llegó hasta la final del Challenger, en la que cayó con el crédito ecuatoriano Giovanni Lapentti.

El domingo, en el Buena Vista Tenis Club, Souza debió jugar tres partidos seguidos, ya que en semifinales venció al chileno Nicolás Massú por parciales de 6-3, 6-2 (partido aplazado por lluvia), en la final derrotó al francés Guillaume Rufin por 6-2, 7-6(4) y cayó en la definición del dobles, junto con su compatriota Marcelo Demoliner, ante los colombianos Juan Sebastián Cabal y Carlos Salamanca.

“Ya había jugado tres partidos antes, pero nunca con tan buenos resultados como los obtenidos acá. Le pude ganar a Massú y luego quedar campeón del torneo. Lástima que no haya cerrado el día con el título de dobles”, indicó Souza.

Otro de los tenistas que tuvo una destacada actuación en el Challenger de Quito fue el chileno Massú. El “Vampiro” llegó a la capital en el puesto 703 y tras acceder a la semifinal del torneo ascendió a la ubicación 526 del ránking de la ATP.

“Cualquier rival se me hace muy difícil, ya que no tengo mayor ritmo. Me puede tocar un juvenil o alguien de mucha experiencia y la exigencia será mucha, ya que no he tenido mayor actividad”, indicó Massú tras superar en primera ronda a Miguel Ángel Reyes, en el arranque de la competencia.

El chileno se mostró motivado la semana anterior en Quito y luego derrotó al serbio Denis Zivkovic en segunda ronda. Massú dio un gran golpe al imponerse en cuartos de final al argentino Eduardo Schwank y avanzó hasta la semifinal.

“He jugado pocos partidos en esta temporada (10) y eso me pesa. Antes jugaba tranquilamente cinco partidos en una semana sin problemas y ahora tengo que esforzarme más”, destacó el doble medallista olímpico (logró el oro en singles y dobles en Atenas 2004).

Massú, quien fue campeón en el Challenger de Quito en 1998 y 1999, ha tenido poca actividad en las últimas dos temporadas debido a una epitrocleitis que padece en su brazo derecho. Esta dolencia es conocida en el tenis como “codo de golfista”.

En la modalidad de dobles, las dos parejas favoritas llegaron a la final. Souza y Demoliner eran los primeros opcionados porque hace menos de un mes habían sido campeones en el Challenger de Campinas, Brasil, y también habían jugado la final del torneo de Cali, Colombia, pero no pudieron ante los colombianos Cabal y Salamanca, quienes se impusieron 7-6 (7), 7-6 (4). Cabe destacar que Cabal fue finalista de Roland Garros en 2011, haciendo pareja con el argentino Eduardo Schwank.