La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, aseguró hoy que Brasil organizará este año "la Copa de las Copas" y que el Mundial "estará en casa", pues "este es el país del fútbol".

La mandataria se pronunció a través de su cuenta en la red social Twitter después de que el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, volviese a criticar los atrasos en las obras para el Mundial, que se disputará en doce ciudades brasileñas a partir del próximo 12 de junio.

"Brasil acaba de darse cuenta, comenzó demasiado tarde. Es el país con más retraso (en los preparativos del Mundial) desde que estoy en la FIFA y era el único que tenía tanto tiempo (siete años) para prepararse", declaró Blatter al diario suizo 24 Horas.

De los doce estadios que acogerán el Mundial, seis aún no han sido terminados, pese a que el plazo de entrega establecido por la FIFA era el pasado mes de diciembre.

Según las previsiones de los organizadores, los estadios de Sao Paulo, que será sede de la inauguración del Mundial, Porto Alegre, Manaus, Curitiba, Natal y Cuiabá estarán concluidos antes del fin del próximo febrero.

En su mensaje a través de Twitter, Rousseff no aludió a las nuevas críticas de Blatter ni a los atrasos, pero aseguró que Brasil es un país que "ama el fútbol y por eso recibirá este Mundial con orgullo y hará de él la Copa de las Copas".

La mandataria afirmó que la venta de entradas para los partidos es la mayor de todas las Copas y apuntó que "eso demuestra que los hinchas del mundo entero confían en Brasil", un país "que está enfrentando el desafío de acabar con la miseria y generar oportunidades para todos", apuntó.

Según Rousseff, los turistas que lleguen para el Mundial "tendrán oportunidad de conocer un país multicultural y batallador" y "serán bien recibidos", porque los brasileños son "alegres y acogedores".

La mandataria agregó que el Mundial de 2014 será "la Copa de las doce sedes, de la floresta amazónica, de las pampas, de las montañas de Minas Gerais, las playas cariocas, las dunas del noreste y la metrópolis de Sao Paulo".