La tercera pelea que van a protagonizar el púgil filipino Manny Pacquiao y el mexicano Juan Manuel Márquez mañana en Las Vegas (Nevada) ha sido definida por los protagonistas como una de los más explosivas de los últimos tiempos.

Como dos viejos conocidos, ambos boxeadores aseguraron que no será una pelea fácil y que la técnica que cada uno de ellos desarrollará sobre el cuadrilátero hará que el enfrentamiento sea memorable,   intenso.

El combate será por el título mundial welter de la Organización Mundial de Boxeo, que pertenece a Pacquiao, y tendrá lugar en el MGM Grand, en Las Vegas, del cual se vendió todo su aforo de 17.000 entradas en solo dos semanas para recaudar aproximadamente doce millones de dólares de taquilla.

Pacquiao, que se ha convertido en uno de los mejores peleadores de la actualidad, hizo a un lado sus actividades como legislador en Filipinas para subir al tinglado por primera vez desde mayo, cuando superó al estadounidense Shane Mosley.

Hace siete años, cuando se enfrentaron por primera vez, Pacquiao tuvo que intensificar su combate para poder conseguir un empate.

En el encuentro que sostuvieron en 2008, el púgil filipino se hizo del triunfo, pero por una diferencia muy pequeña y, como sucedió en la primera pelea, con un final que dejó algunas dudas. EFE