La forma en que Maximiliano Bevacqua festejó su último gol muestra todo lo que tenía reprimido. Fue en la derrota del Deportivo Quito 1-2 ante El Nacional, el miércoles pasado, en el estadio Atahualpa.

Hace 22 partidos que no festejaba. Su último tanto lo consiguió el 17 de septiembre de 2011 ante el Imbabura (2-2), de la misma forma que el primero de 2012: de penal, y en el mismo arco (sur) del Atahualpa;  la única diferencia es que en aquella ocasión cobró hacia la izquierda de Johvani Ibarra, mientras que la anotación del miércoles fue hacia la mano derecha de Bonard García.

En las últimas jornadas, el goleador del club en la temporada pasada con 20 dianas, no aparecía en el 11 titular y fue relegado al banco. Incluso, en el partido anterior contra Independiente del Valle, actuó con el equipo de Reservas que cayó 3-2.

La ausencia por expulsión de su compatriota Matías Alustiza, quien le ganó la titularidad en Copa Libertadores y en el torneo nacional, permitió a Bevacqua retornar al once inicial del DT Carlos Ischia.  Él fue uno de los que le brindó su respaldo, cuando no lograba convertir.

“Es un gran atacante, que le dio muchos goles importantes al Quito para conseguir el campeonato del año pasado. Si le entra un gol, seguro van a venir muchos más”, comentó el argentino, que deberá cumplir con dos fechas más de suspensión.

Bevacqua mantuvo la tranquilidad en los momentos de tensión por no marcar en calidad de goleador. “Estaba calmado porque sabía que ese momento (de marcar) iba a llegar. Pasó mucho tiempo, pero nunca dejé de entrenar bien para  poder actuar con en el club”, aseguró.

En el estadio estuvo su esposa Lucrecia Portmann, a quien le dedicó el tanto por su embarazo. La pareja espera su segundo bebé, que será una niña, ya tienen un niño de 2 años y medio llamado Milan.

Ellos han sido el respaldo que ha tenido “Maxi”, como lo conocen sus compañeros, en sus múltiples equipos en Europa y también en Ecuador desde que llegó al Manta  en 2010.

El año pasado llegó a Deportivo Quito pedido por el DT Fabián Bustos, quien estuvo hasta mayo y luego fue reemplazado por Ischia. Bevacqua se mantuvo siempre como titular y disputó 39 partidos, incluidos los dos de la final ante Emelec.

Ischia mantuvo la confianza en el atacante, a pesar de que no lo ponía mucho en el once inicial. “Tuvo un buen reencuentro con el equipo y le va a hacer bien después de no haber marcado tanto tiempo”, comentó.

El estratega aseguró que  quieren recuperar al goleador que tuvo el conjunto quiteño el año pasado y que los ayudó a conseguir la quinta estrella. “Ayer (miércoles) peleó mucho arriba e hizo un gran esfuerzo.  Tuvo dos ocasiones más para marcar, pero no lo consiguió. Ahora que anotó vamos a querer que entre en una racha positiva”, contó.

En los torneos anteriores, el argentino tuvo una media de 20 goles. En 2010, en su primera temporada en Ecuador con el Manta, anotó 22 y el año anterior marcó 20. Con esa cantidad se mantuvo como el máximo goleador por gran parte del torneo, pero luego fue superado por Juan Luis Anangonó de El Nacional, que logró 22 y Narciso Mina, que con Independiente llegó a 28.

En 2010 igualó en la tabla de goleo con Hernán Barcos de Liga de Quito y ambos fueron superados por Jaime Ayoví que anotó 23 y hoy juega en el Pachuca mexicano.

Luis Checa es duda para Copa

El defensa central de Deportivo Quito, Luis Checa, sufrió una distensión muscular en su pierna derecha durante el partido contra El Nacional, por lo que es duda para enfrentar el martes a Defensor Sporting por la Copa Libertadores.

El médico del club, Pablo Cisneros, aseguró que evaluarán al jugador por 72 horas para determinar si llega al partido. Mientras que Geovanny Espinoza, que no actuó por una molestia, llegará a tiempo para el cotejo, al igual que Luis Fernando Saritama y Freddy Olivo que terminaron golpeados.

Deportivo Quito difirió el partido de la décima fecha del torneo contra Olmedo en Riobamba, por lo que se enfocará en el choque ante los uruguayos en el Atahualpa. El último partido de Libertadores será el 17 de abril contra Chivas de Guadalajara, también en la capital.