La Tricolor extrañará a Felipe Caicedo ante Venezuela el martes
En los últimos encuentros de las eliminatorias se ha convertido en el grito de gol de la selección ecuatoriana de fútbol.
Cuatro goles de buena factura consolidan el buen momento que Felipe Caicedo atraviesa en la Tricolor luego del distanciamiento tras la Copa América que se disputó el año anterior en Argentina.
En las gradas, los hinchas depositaron sus esperanzas en el atacante del Lokomotiv ruso, por todo lo que venía haciendo en el equipo que dirige Reinaldo Rueda.
Desde el inicio del compromiso se mostró, corrió en todo el frente de ataque, pidió la pelota e intentó habilitar a su compañero Cristian Benítez y en los primeros minutos avísó con un remate.
A los 10 minutos, Caicedo hizo una buena jugada individual al borde del área, pero su disparo con la pierna derecha (que no es su fuerte), salió desviado.
En una jugada sin historia (30’), el delantero cometió una falta sobre un rival; el juez no dubitó en sacarle la tarjeta amarilla y con ello “Felipao” se convirtió en la primera baja de cara al juego ante Venezuela a disputarse el próximo martes.
A los 33’ llegó la primera explosión de júbilo. Saritama recuperó una pelota, esta le quedó para Caicedo, quien sorteó con clase al portero Pinto y esta vez no falló con su pierna derecha. Mandó el balón al fondo de la red, pese al acoso de un defensor contrario.
El arponero corrió hasta la tribuna, abrió los brazos y festejó con la hinchada, quizás con la intención de agradecerles por la confianza depositada en él.
Su performance se mantuvo impecable en la etapa complementaria. Un taquito a los 47’ para Benítez por poco se convierte en el segundo tanto, pero el balón salió desviado.
Cuando se disputaba el minuto 55’, Caicedo falló una pena máxima, el rebote le quedó y así marcó la segunda diana. Esta vez no festejó en señal de molestia con el juez central, ya que en el punto penal había un pequeño hueco que quizás incidió en el remate final.
El cansancio físico fue el motivo por el que “Felipao” tuvo que salir de la cancha y ahí, de pie, la gente lo despidió con una fuerte ovación.
Tras el compromiso, el atacante se dio tiempo para brindar autógrafos y tomarse fotos con los hinchas, quienes seguramente lo extrañarán ante Venezuela. (EHP)