La pelota cambió de cancha. Dejó el campo de juego quiteño y pasó al guayaquileño. Así lo confirman el momento y el nivel que muestran los clubes de estas dos ciudades en el Campeonato Nacional. 

Aquella afirmación se confirmó este fin de semana, en la fecha 17 del torneo. El Nacional dista del equipo aguerrido y protagonista que ha sido en otras temporadas. Los nacionalistas, dirigidos por Sixto Vizuete, luchan apenas por no descender (ver estadísticas).  

Lo más preocupante es que no hay señales de recuperación. ¿Será que la dirigencia debe empezar a replantear la normativa que los obliga a contratar únicamente a jugadores ecuatorianos? El debate debe abrirse entre los hinchas y directivos.

En el Deportivo Quito el problema es más grave y rebasa lo estrictamente futbolístico. El club,  presidido desde la semana pasada por Iván Vasco, le adeuda al Servicio de Rentas Internas $773.918,78. A esto hay que agregarle los 300.000 dólares que debe por la construcción de un nuevo complejo deportivo.

Liga de Quito ya se resignó y el técnico Edgardo Bauza admitió que fue un “mal año”. Ahora los albos apuntan a reforzarse para la próxima temporada.

Barcelona es el candidato más firme para ganar el título, incluso sin ir a una final. Esto es producto del juego  agresivo y en conjunto que ha alcanzado de la mano del DT Gustavo Costas. Emelec, pese a los últimos resultados, mantiene sus opciones intactas.

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