La fuerza espiritual del pueblo ‘mima’ a los seleccionados
La ilusión por clasificar a la próxima cita mundialista de Brasil 2014 se mantiene latente. Paulatinamente el seleccionado ecuatoriano va transitando el largo y difícil camino para alcanzar su propósito. Los sólidos argumentos futbolísticos y físicos en condición de local para mantener su imbatibilidad en el Atahualpa, como ha ocurrido hasta el momento, mantienen en carrera a los tricolores cuya aspiración es cerrar el año sosteniéndose en zona de clasificación.
Esa fuerza anímica y espiritual que transmite todo un pueblo, en favor de sus “mimados”, no tiene límites, incluyendo a aquellas personas que por circunstancias propias de la vida soportan alguna discapacidad, es el escudo para enfrentar las vicisitudes que se presentan cuando menos se lo espera.
En el sitio destinado exclusivamente para gente discapacitada, Tobías Jerez siguió con vivo interés las incidencias del triunfo ecuatoriano, sentado en una silla de ruedas. “Por primera vez vemos un partido así, sin que nadie nos moleste en los costados, siempre pagamos entrada pero ahora el trato es muy diferente, como personas que nos merecemos todo el respeto, como las demás”, nos comentó antes de abandonar el estadio por sus propios medios.
Dijo ser independiente en su vida y el trolebús o la ecovía son los medios de transporte que utiliza para acudir al estadio. “Uff... en un principio estuve medio nervioso, pero con este 3 a 1 me siento muy feliz y contento y aprovecho esta oportunidad para decirles a los jugadores que estamos con ellos, que nuestro apoyo no va a desmayar y aunque no voy a ir a Venezuela, desde aquí junto con mis compañeros discapacitados estaremos haciendo fuerza, porque queremos ir a un tercer mundial”, sostuvo con relación al partido.
Junto a él se encontraba Marco Turbi, de 42 años de edad, quien también destacó el buen trato recibido. “Somos adictos al fútbol, siempre vengo con mi sobrino a este sitio que lo tenemos ya exclusivamente y la gente ya sabe que nosotros nos ponemos aquí y nos respetan; pero uno de los problemas es que el baño pasaba cerrado, pero ahora y por primera vez está abierto y por eso muchas gracias, porque la sociedad por fin nos ha aceptado a las personas con discapacidad”, dijo.
Precisó que había comprado un abono y no encontró mayor problema en canjearlo por la entrada. “También estuve nervioso, pero ahora estoy disfrutando; ese Felipao es un gran jugador, nos da mucha alegría y lo único que le digo es que siga siendo un referente del fútbol ecuatoriano y le quiero decir gracias por este triunfo, a él y a todo el equipo, porque seguimos en el camino que nos va a llevar a Brasil”, sostuvo el hincha quiteño.(FMR)