El triatlón ecuatoriano sigue dando batalla a nivel internacional. Su mejor exponente, Elizabeth Bravo, se adjudicó el primer lugar en damas al haberse impuesto con un tiempo de 1 hora, 8 minutos y 14 segundos en una carrera emocionante en las pruebas de ciclismo y natación.

Bravo demostró que el haber estado inactiva por cinco meses debido a una lesión (fractura del antebrazo izquierdo), no fue impedimento para seguir en la élite de este deporte. Volvió hace poco en el Challenge de Galápagos, donde consiguió el primer lugar.

En estos XVII Juegos Bolivarianos, de Trujillo 2013, la representante nacional combatió cuerpo a cuerpo con la colombiana María Vargas, quien llegó 16 segundos más tarde que Elizabeth. Lo positivo del evento es que el podio lo completó otra ecuatoriana: Cristina Farez, una joven triatleta que a nivel internacional está demostrando un gran potencial a su corta edad.

Durante la natación, Bravo no dio muestras de dolencia en su brazo; es más ni siquiera se notaba que dentro suyo llevaba dos placas de titanio y 12 tornillos, eso debido a que sus huesos no resistieron y se quebraron. En total fueron 750 metros los que nadaron en las aguas de Puerto Salaverry, a las afueras de Trujillo.

Del agua no salió primero, pero tampoco estaba tan distanciada de la colombiana, que empezó con buen ritmo. Ya en la bicicleta, la ecuatoriana comenzó a pedalear más fuerte y le sacó cierta ventaja. Después, en el atletismo, la azuaya dominó y en los últimos 2 kilómetros (eran 5 en total) aceleró para quedarse de esta manera con el primer lugar. Mientras su compatriota Farez, demostró que su fuerte también es el correr ya que estuvo a un segundo de colgarse la de plata.

Farez necesitó de 1h18m31 segundos para llegar a la meta. Su actuación dejó gratas sensaciones al cuerpo técnico del triatlón ecuatoriano que vieron como sus dos exponentes femeninas tuvieron una destacada actuación.

Pero en varones también hubo presea para Ecuador. Juan José Andrade se adjudicó la tercera posición al haber hecho un tiempo de 58 minutos y 44 segundos. Los más rápidos en esta prueba fueron el colombiano Carlos Quinchara (57:20) y segundo fue el chileno Felipe Van de Wingard que necesitó de un “crono” de 57:57.