Real Madrid recuperó la mentalidad ganadora tras propinarle un 5-1 al Deportivo de la Coruña con un fantástico “triplete” del delantero portugués Cristiano Ronaldo.

Era una jornada marcada para enmendar el mal inicio de temporada. El madridismo tenía esperanzas de error del Barcelona en Sevilla para llegar al Camp Nou con una desventaja menor. Remontaron los de Tito Vilanova sobre el final y eso hizo que los “merengues” estén obligados a ganar en esta fecha.

Ante una semana importante -partido europeo ante el Ajax y visita al Camp Nou-, Mourinho vio el momento de dar descanso a Xabi Alonso y en su lugar ubicó a Sami Khedira como único medio centro, con la calidad del dúo Özil-Modric.

La visita se adelantó en el marcador a los 16 minutos mediante una gran definición de Riki. Real Madrid sí tenía velocidad en su juego. Si nada se torcía, la remontada era cuestión de tiempo.

Özil, azuzado continuamente por Mourinho, aparecía con pases al vacío repletos de brillantez. A Modric le costaba aparecer, pero cuando lo hizo desequilibró. La ocasión más clara la tuvo Di María, que la pico en exceso esquinada ante el portero.

Se desquitó provocando un penalti. Con facilidad se fue de Manuel Pablo y fue derribado. Cristiano lo marcó con mucha calidad.

Deportivo no se levantaba. Minutos de duda que le costaron caros. Salvó lo que pudo el portero Aranzubia, brillante de reflejos ante un remate de Cristiano en carrera tras un nuevo pase de Khedira, pero nada pudo hacer ante Di María (38’).

Nuevamente el portugués apareció por el área rival y con un cabezazo mandó el balón a la red (44’). La tarea de remontar era ya misión imposible para el Deportivo en su regreso a la élite.

El zaguero Pepe cabeceó con potencia para marcar el cuarto y el estadio entero coreó su nombre mientras se lo dedicaba a Mourinho (66’).

Cristiano cerraba la fiesta. “Hat-trick” y ya seis goles en Liga para igualar a Lionel Messi. El portugués recupera la sonrisa y el Real Madrid empieza a respirar.