El futuro del deportista está bien asegurado
Para los dirigentes deportivos en el país, la decisión del Gobierno Nacional de profesionalizar a los atletas ecuatorianos es un acierto sin precedentes en la historia del Ecuador. “Esto es un hecho histórico para el país”, manifestó Gabriel Veloz, presidente de la Federación Ecuatoriana de Tenis de Mesa (FETM), quien espera que la nueva estructura del alto rendimiento no termine con el mandato del actual presidente, Rafael Correa.
En este Plan de Alto Rendimiento constan 278 exponentes de las categorías senior, juvenil y prejuvenil. El objetivo no es solo participar en los Juegos Olímpicos Río de Janeiro 2016 -para los que se proyecta obtener un mínimo de tres medallistas-, sino también mejorar en las próximas participaciones de ciclo olímpico.
Según Veloz, el cambio es asombroso, ya que tener como ministro del Deporte a un ex futbolista (José F. Cevallos) y en los directorios de las federaciones ecuatorianas a otros ex deportistas ha optimizado la planificación. Nadie conoce como ellos las necesidades de los deportistas.
A ello se añade el control del Estado sobre estos recursos, situación que permite un manejo transparente de los fondos públicos, permitiendo regularizar su administración. La preparación, costos de entrenadores, hospedajes y viajes son objeto permanente de rendición de cuentas. Sin embargo, lo mejor es contar con un respaldo sostenido.
Veloz recordó todo lo que sufrió en su época de microtenista, ya que fueron sus padres quienes desembolsaron dinero y le permitieron entrenar. Ahora esas preocupaciones terminaron.
Son 9 los mesotenistas que integran el Plan de Alto Rendimiento: Eunice Gálvez, Nicole Maldonado, Giovanny Coello, Alberto Miño, Dino Suárez, Marlon Vite, Danny García, Iván Proaño y Rodrigo Tapia.
Vite, de 15 años; García y Gálvez, de 14, son las promesas ecuatorianas para acudir a las Olimpiadas de 2016. “Apuntamos a Río, sería una gran experiencia, pero también en el futuro queremos estar en los Juegos Olímpicos de 2020”, dijo Danny.
El microtenis del país subió de nivel en los últimos años, incidió mucho la vinculación del guayaquileño Alberto Miño a la Liga francesa (2010), donde cosechó el título por equipos Pro B. En representación del país obtuvo la medalla de bronce en el Panamericano, Guadalajara 2011.
Actualmente, el microtenista de 22 años milita en la Liga alemana. El TTC Zugbrücke Grenzau, que lo fichó por los próximos dos años. Aunque lamentó no haber clasificado a los Juegos de Londres, está contento por el impulso que representa el respaldo del Ministerio del Deporte, su meta es ir a Río de Janeiro.
¡No más improvisación!
Los judocas también evidencian optimismo. Fernando Ibáñez, de 24 años, relató que antes debía ingeniárselas para conseguir auspicios, ahora, gracias a la beca C, que le otorga mensualmente tres salarios básicos unificados (954 dólares), se dedica exclusivamente al deporte.
La beca también le garantiza entrenador, vitaminas, implementos y viajes; desplazarse en nombre del Ecuador no será más una casualidad. Su carrera deportiva se estabilizó.
El judoca se inició desde joven en esta disciplina, ha ganado títulos sudamericanos infantiles, así como copas panamericanas. Fue campeón nacional un sinnúmero de veces en la categoría 73 kilogramos, pero como su futuro en esta disciplina era incierto, estuvo dos años inactivo (2006 y 2007); durante ese tiempo residió en los Estados Unidos.
El año pasado (2012) se lesionó la rodilla, circunstancia que le impidió terminar la temporada con los resultados esperados. Ya recuperado, está listo para continuar. Las desilusiones de no poder acudir a torneos que le hubiesen permitido clasificar a las copas del mundo quedaron atrás. Los estímulos de este plan le devolvieron la confianza; ahora cree que puede clasificar a los Juegos Olímpicos.
El ranking del judo mundial es parecido al del tenis: los deportistas deben viajar mucho y participar en topes. Así, anualmente, los judocas suman puntos y los mejor ubicados clasifican a las Olimpiadas.
El sistema de puntuación del Plan de Alto Rendimiento colocó a Ibáñez en la beca C. De no ser por la lesión, que le imposibilitó competir más de seis meses, de seguro habría logrado una beca más alta, de hecho, su anhelo es conseguir el subsidio de clase A, algo que le acercaría mucho a los Juegos de Río de Janeiro.
Coordinación
Sobre la evaluación a los atletas, Oswaldo Hidalgo, presidente de la Federación Ecuatoriana de Ciclismo (FEC), expresó que los departamentos técnicos de la cartera del Deporte y de las Ecuatorianas tomaron en cuenta los resultados del 2011-12 de los exponentes.
En el ciclismo constan 22 pedalistas, quienes sobre la base de su rendimiento en torneos nacionales e internacionales fueron distribuidos en las becas C, D y E. En la beca C están 7 ciclistas, en la D constan 12 y en la E se encuentran 3. Entre ellos están divididos competidores de ruta, pista, montaña y BMX.
Por cada uno de ellos se asignó un presupuesto. Citó el caso de Byron Guamá (C), quien realiza “lides” de ruta y pista. Él cuenta con 60.000 dólares para todo el año. Del rubro se desprenden mensualmente 954 dólares, implementos, vitaminas, pago de pruebas antidopaje, viajes, y más. Si la planificación de Guamá rebasa los 60.000 dólares en tres o cuatro meses, hasta ahí llega su preparación. Pero si al terminar el año no invirtió todo ese dinero, el restante debe devolverse al Estado.
Algo importante es que los aportes gubernamentales no impiden al deportista recibir auspicios de empresas privadas. Guamá compite por el equipo Movistar de Colombia y no se lo excluyó de este plan.
En torno a la pugna que existe en el Ministerio del Deporte y el Comité Olímpico Ecuatoriano (COE) con las Nacionales, la posibilidad de representar al país en el exterior depende del aval de los directorios reconocidos por las Internacionales.
En virtud de esto, los representantes de las Ecuatorianas constituidas según la nueva Ley del Deporte, piden a las que tienen el apoyo de los organismos internacionales que permitan competir a los exponentes y no atenten contra sus derechos, ya que en la actualidad, por sus prácticas deportivas, constituye su trabajo diario.
Hidalgo señaló que dentro del ciclismo las relaciones con Luis Ramírez, directivo reconocido por los entes internacionales, son buenas y no ha impedido la salida de pedalistas ecuatorianos al exterior, por este motivo Ecuador contó con representantes en el Giro a Guatemala e inscribió a los ciclistas en el Panamericano de Zacatecas (México), cuyas pruebas terminarán hoy.
Proyección
El 30% de los deportistas incluidos en el Plan de Alto Rendimiento está integrado por atletas juveniles y prejuveniles, con quienes se posibilitarán procesos más largos, es decir, sus edades (14 a 18 años) les permitirán participar en 3, 4 o más ciclos olímpicos. Su preparación no será afectada por la falta de apoyo que sufrieron los senior. Una de las exponentes con buenas expectativas es la pesista Neisi Dajomes, de Pastaza, quien el mes pasado ganó el campeonato absoluto de la categoría 69 kg del Mundial Sub-17, que se efectuó en Taskent (Uzbekistán).
De acuerdo a Walter Llerena, su ex entrenador y titular de la Federación Deportiva de Pastaza, la aplicación de este plan inicia en el momento justo, pues le permitirá a la pesista adolescente sostener su preparación sin inconvenientes.
La idea es lograr intervenciones alentadoras en participaciones internacionales, entre ellas los Juegos Bolivarianos de Trujillo (Perú), en noviembre próximo, y en los Juegos Olímpicos de la Juventud, que se desarrollarán en agosto de 2014, en Nankín (China), a los que clasificó gracias a su título planetario.
Neisi, en tanto, está feliz. El 12 de este mes cumplirá 15 años y se siente estimulada porque ya recibió sus “salarios” de febrero, marzo y abril. Está dentro de la beca C, por lo que su asignación mensual en 2013 es de 954 dólares.
Su tiempo está bien dividido. De 07:00 a 13:00 acude al colegio Camilo Gallegos Domínguez, ubicado en la parroquia Shell, y de 16:00 a 18:00 concurre a las prácticas con su entrenadora Mayra Hoyos. Dajomes viene de un hogar humilde, su madre (Orselina Dajomes) vendía comida en la calle para mantener a sus 6 hijos. Esa carga es menos pesada ahora, porque Neisi ayuda con el dinero de su beca.
Una realidad similar vive el ciclista imbabureño Cristian Pita, que cumplió 18 años en febrero. Nunca recibió ayuda económica por una beca deportiva y, debido a la falta de apoyo, en muchas ocasiones su entrenamiento no servía de nada. Varias veces sintió la frustración de no poder competir en el exterior.
En 2013 Cristian está en la categoría D, mediante la cual recibe dos salarios básicos (636 dólares). Esos recursos le facilitaron los ensayos, sus padres ya no tienen que costearle su carrera; parte de los ingresos que percibían por el gimnasio y almacén de bicicletas que administran la destinaban a los entrenamientos de su hijo.
Pita fue incluido en el plan en respuesta a la medalla de plata que conquistó en la lid de ruta del Campeonato Panamericano Juvenil que se efectuó en abril de 2012, en Guatemala. Y a las preseas de oro que se adjudicó en los Juegos Nacionales Juveniles de ese año; ganó en pista, ruta, cross y contrarreloj.
Sus metas son brillar en torneos internacionales, como el Panamericano que se efectuará el mes entrante en República Dominicana, y con ello sumar puntos para entrar en 2014 a la beca C. Aspira a comenzar el próximo año los estudios universitarios en hotelería y turismo, anhelo que espera cumplir con el financiamiento del Mindeporte, pues el Plan de Alto Rendimiento también le brinda esa posibilidad.