Era la deuda pendiente del béisbol dominicano: un trofeo que convalidara esa condición de ser el país que da más peloteros a las Grandes Ligas. Tantos ganadores de premios al “Más Valioso”  y muchas leyendas en el Salón de la Fama. Este año, con 95 beisbolistas, República Dominicana volvió a liderar la cifra de peloteros nacidos en el exterior al inicio de la pasada temporada.

Faltaba el título en una gran cita internacional para acabar de inflar el pecho. Eso llegó la noche del pasado martes, al conquistar el título de la tercera edición del Clásico Mundial  al vencer 3-0 a Puerto Rico. La consagración fue enfática: acabó invicto con ocho victorias.

“Es el mejor regalo que le podemos dar a República Dominicana”, aseguró el mánager Tony Peña, luego de atender una llamada del presidente Danilo Medina, quien dijo que la expectativa por el Clásico fue excepcional en el país. Más de 50.000 fanáticos se reunieron para ver la final en pantallas gigantes instaladas dentro y fuera del estadio de Quisqueya, en Santo Domingo.

El entusiasmo se hizo sentir  en el AT&T Park de San Francisco, ciudad donde los hermanos Felipe, Jesús y Mateo Alou hicieron historia al actuar de jardineros con los Gigantes durante varios juegos.

“Esta fecha será declarada como feriado nacional”, dijo Moisés Alou, gerente del equipo, quien junto con Peña fueron responsables de asumir el desafío de enterrar aquel amargo recuerdo de hace cuatro años, cuando el conjunto decepcionó al quedar eliminado en primera ronda.

La figura Robinson Canó, segunda base de los Yankees, fue el “Jugador Más Valioso” al batear 15 de 32; con 2 jonrones, 6 remolcadas, 6 anotadas y 2 dobles. Batió el récord de más hits en una  edición.