Tras una reunión que duró cerca de 3 horas, ayer los jugadores del Deportivo Quito decidieron viajar  hasta Guayaquil y esta noche (19:30) se presentarán en el duelo ante Barcelona en el estadio Monumental.

La diferencia económica que reclamaban logró solventarse parcialmente, pero según aclararon los jugadores, gracias a  “personas ajenas a la institución”.

“Tenemos una suma que en algo ayuda a solventar el viaje y así cumplir en lo deportivo. Aunque debo recalcar que de parte del presidente no ha existido ningún acercamiento, seguimos esperando”, expresó el defensa Luis Checa en una conferencia de prensa.

Los jugadores ayer vivieron un día no habitual. No hubo entrenamiento en el complejo de Carcelén. La actividad matinal de los futbolistas fue totalmente administrativa y  se desarrolló en las oficinas del conjunto “azulgrana”, en el centronorte de la ciudad.

Los extranjeros Fabián Carini, Federico Nieto y Robert Flores fueron los primeros en arribar al edificio Alemania, donde aguardaba el gerente deportivo, Vladimir Ortiz, quien es el enlace entre la dirigencia y los jugadores para buscar una solución a la complicada situación financiera del plantel.

El club adeuda a la mayoría de jugadores tres meses de sueldo y a otros, incluido el técnico, 7 meses. Ellos  exigen al menos la cancelación de un mes que representa 350 mil dólares de egreso para la dirigencia.

Previo a la reunión, a la que también llegaron Luis Checa, Luis Romero, Giovanny Caicedo, Álex Colón y Jorge Guagua, el gerente deportivo advirtió que si los jugadores decidían no viajar a Guayaquil dejaría su cargo.

Ortiz es el único directivo con el que conversan directamente los futbolistas, con los otros apenas han existido diálogos telefónicos. Incluso, en  algún momento el delantero Walter Calderón mencionó que estaban “abandonados y que el club no tenía presidente que los respalde”.

En los bajos del edificio, alrededor de 35 hinchas se dieron cita con camisetas y una bandera gigante con los colores del plantel.

Ellos comenzaron a entonar cánticos, similares a los que gritan en el graderío del estadio Atahualpa. Pero esta vez no era para alentarlos en un duelo deportivo, sino para exigir el pago de las deudas. “Jugador, jugador, te venimos alentar. Si no pagan los sueldos el relajo se va a armar”, cantaron.

Incluso se mostraron algo agresivos y quisieron golpear a los camarógrafos que intentaron filmarles. La presencia de policías fue necesaria para calmar los ánimos de los hinchas.

Mientras eso ocurría en las oficinas del club, el presidente Iván Vasco esperaba impaciente en un banco, con su agente de crédito, que le otorguen un nuevo préstamo para reunir el monto que los jugadores exigían.

“Vamos a honrar las deudas. La solución existe, pero no a la velocidad que ellos esperan”, sostuvo Vasco y pidió nuevamente paciencia a los jugadores. Al momento existe una cuenta corriente abierta en el Banco General Rumiñahui, en la que los hinchas “chullas” hacen voluntariamente su aporte económico y todo lo que se recauda se utiliza para pagar sueldos retrasados.

Cerca de las 13:00 el gerente deportivo acompañado de Álex Colón, Jorge Guagua y Luis Checa salieron de la reunión para recoger un dinero ofrecido. En la tarde se reunieron en Carcelén, efectuaron una leve práctica y luego  viajaron a Guayaquil.

Los problemas económicos del plantel quiteño en este año iniciaron desde la tercera fecha del campeonato (8 de febrero) cuando recibió la primera advertencia de la Ecuafútbol para que cancele una deuda pendiente.

“Si no se lo hacía, el plantel no podía presentarse y perdía los tres puntos. En caso de reincidir, el castigo era la pérdida de la categoría y el descenso a la segunda división provincial”, adujo Vasco. Los pasivos de la institución “azulgrana” se acercan a los 4,5 millones de dólares y al menos un millón ya lo ha cancelado la actual dirigencia.

BARCELONA RECIBE A LOS “CHULLAS” CON DOS BAJAS OFENSIVAS

Gustavo Costas, técnico canario, no podrá contar con el volante Matías Oyola, suspendido por acumulación de tarjetas, ni con José Ayoví, que presentó fatiga muscular. Luis Caicedo reemplazará a Oyola en la media cancha y hará dupla con Carlos Gruezo en la contención. Holger Matamoros superó su lesión y se encuentra a órdenes del cuerpo técnico  en la banca de suplentes.

Costas alinearía con Máximo Banguera en el arco y mantendrá la línea de 4 con Pedro Velasco, Frickson Erazo, José Luis Perlaza y Giovanny Nazareno; en la zona de volantes estarán Juan Carlos Paredes, Carlos Gruezo, Luis Caicedo y Damián Díaz, para dejar en la delantera a Michael Arroyo y Ariel Nahuelpán.