Brasil logró imponerse por la mínima diferencia (1-0) a Venezuela, gracias a un gol de Felipe Anderson desde el punto penal.

El partido tuvo todos los requisitos para terminar sin goles, pero un tiro desde los doce pasos cambió el resultado de un juego “pálido”.

La primera parte transcurrió con más pena que gloria, en donde las ocasiones de gol más cercanas fueron pelotazos con destino a las gradas.

No obstante, una tonta acción de Sifontes dio origen al único gol. El defensor venezolano tomó de la camiseta a Candido y el juez decretó penal.

Anderson batió a Contreras con un remate fuerte y al medio. Para la segunda mitad se esperaba un equipo de Venezuela más ofensivo, y así fue.

Sin embargo, el intento de la “Vinotinto” no fue lo suficientemente claro para emparejar las acciones. Brasil apostó a esperar atrás y tratar de sentenciar el partido al contragolpe.

Hoy, a las 15:45, Paraguay se mide a Bolivia por el Grupo del Sudamericano, mientras que Argentina se juega la clasificación ante Colombia (18:00).