Athletic de Bilbao conquistó la tarde de este jueves uno de los escenarios legendarios del fútbol Europeo, Old Trafford, donde impuso su juego ofensivo ante un Manchester United con pocos recursos en la ida de los octavos de la Liga Europa (2-3).

Un gol de Fernando Llorente en el primer tiempo, uno de Óscar de Marcos en el segundo y otro de Iker Muniain con los noventa minutos cumplidos contrarrestaron el tanto inicial de Wayne Rooney.

El segundo del delantero inglés, de penalti, en el tiempo descuento, dio algo de aire a los "diablos rojos" de cara al partido de vuelta, el 15 de marzo, que sin embargo el Athletic afrontará con la ventaja de haber sumado tres goles en campo contrario.

Al United se le complicó el partido ante un Bilbao que le plantó cara en su propio estadio, le arrebató el balón y supo desactivar los feroces contragolpes con los que los de Alex Ferguson están acostumbrados a sentenciar encuentros comprometidos como el de esta noche.

Rooney abrió el marcador a los 22 minutos después de conectar un rebote que  el arquero visitante dejó en el área chica. Cuando ya se terminaba el primer tiempo Fernando Llorente, emblema del Bilbao, convierte el empate de cabeza que es su especialidad.

El equipo vasco fue quien en el segundo tiempo propuso juego y ataque, lo que dió sus frutos. El volante De Marcos al 72 logra desnivelar el marcador y el joven Muniain al 90 puso el 3-1. Luego, Wayne Rooney marcó de penal para sentenciar el partido y termine 3-2 a favor del equipo español.

El ecuatoriano Antonio Valencia estuvo ausente en el equipo inglés por lesión, pero es muy probable que este de regreso para el partido de vuelta en el San Mamés.