La recta final de la Liga Nacional Femenina de Baloncesto ha cobrado aires de espectacularidad. La segunda vuelta del certamen, iniciada la semana anterior, arroja resultados sorpresivos con triunfos de los quintetos visitantes como ocurrió el viernes anterior en el coliseo J.C.

Hidalgo, cuando el equipo favorito UTE cayó en casa frente al representativo del Santa María-USFQ 77-80, mientras en Machala, el líder del certamen, Orense SC, fue superado 75-66 por el plantel mavorista.

La senegalés Astou Traoré es la máxima encestadora de Mavort y del certamen, luego de la séptima fecha al registrar 236 puntos.

Ante la afición capitalina la africana volvió a deleitar con su efectividad dentro y fuera de la llave; en todos los cotejos disputados, su media de conversión es de 30 puntos, aunque “hay partidos en que anoto hasta 48 (encestó 49 ante Uruguay), todo depende, porque no siempre se juega bien y se lo hace más o menos”, advierte la ex mundialista.

Traoré se vinculó al elenco “constructor” hace una temporada, por medio de un agente de jugadoras de la liga española y europea. La senegalés es de las más valoradas técnicamente en la Liga y ha logrado convertirse en uno de los soportes de su equipo.

Aún sin hablar fluidamente el español, habida cuenta de que en su país el idioma oficial es el francés -pero ella,  también, se expresa en inglés-, no fue difícil entablar el diálogo, pues su militancia por varios años en la Liga 1 Profesional del Básquetbol de España le ha permitido aprender el castellano.

Astou refiere que la práctica del baloncesto la inició cuando tenía 12 años y su trajinar por las canchas, españolas especialmente, se ha extendido por espacio de 19 temporadas (actualmente tiene 31 años).

Dijo sentirse bien en su club, el Mavort, siendo esta su segunda incursión en la Liga Nacional Femenina Ecuatoriana. “Es un equipo que juega muy bien y soy la más efectiva; mi forma de jugar es 1 contra 1 y ese es mi fuerte, pero a  veces estoy sola para poder lanzar de tres”, sostiene la  alera pivot de 1,83 m de estatura.

No hay antecedentes respecto a la participación de jugadoras africanas en el baloncesto ecuatoriano y posiblemente, es la primera en hacerlo, aunque ahora su compatriota Sarah Touch Ousmsul juega en el Orense, también como  figura.

Astou destaca el espíritu solidario de sus compañeras, porque “yo he venido acá  para ayudarlas y ellas también tienen que apoyarme. Jugamos en equipo, por eso ganamos y en la cancha nos sentimos muy bien”.

Al baloncesto ecuatoriano no lo considera auténticamente profesional, pues aseguró que no tiene la dureza que hay en España, pero ha procurado asimilar la situación. No ha tenido mayores inconvenientes para adaptarse al medio quiteño en cuanto a la alimentación, sin mostrar predilección por algún plato en especial.

Afirmó que sus mejores actuaciones en Ecuador fueron en climas cálidos, porque son un tanto parecidos al de Senegal, en donde “nunca hace frío”.

El técnico nacional Patricio Poncel sostiene que los aportes extranjeros (Astou Traoré y la ex Ourinhos, Yacquelyn Plutín) rinden de la mejor manera. “Son buenas jugadoras, muy positivas para el grupo, les gusta trabajar y estoy muy contento con ellas, pero todavía pueden dar más, no han llegado a un techo y no olvidemos que los demás equipos tienen excelentes extranjeras. Este año han venido profesionales de primer nivel”.

Traoré tuvo gran presencia en la Liga Nacional del año anterior y en esta nueva incursión en el baloncesto ecuatoriano aspira a repetir su designación como la mayor encestadora. “Me encantaría ser la máxima anotadora de la Liga, tengo buenas posibilidades, pero debo esforzarme más, hay otras jugadoras que también tienen muchos méritos, así que va a ser difícil”. (FMR)