El Arsenal se quedó hoy a un gol de igualar el 4-0 sufrido en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones frente al Milán y fue eliminado de la competición, tras arrollar al equipo italiano en una primera parte con tres goles que hizo soñar a sus aficionados con una remontada histórica.

Un gol a los 6 minutos del francés Laurent Koscielny devolvió la fe a las gradas del Emirates, y los tantos del checo Tomas Rosicky(min 26) y el holandés Van Persie(min 42) sellaron un 3-0 antes del descanso que dejaba la clasificación al alcance de la mano para los locales.

El Milán llegaba a Londres con intención de plantarse en su campo, pero el desorden en su defensa y el vigor de un Arsenal convencido de sus posibilidades puso contra las cuerdas a los italianos.

Los gunners, al contrario de lo que sucedió en San Siro hace tres semanas, mantuvieron el control del juego sin perder balones en el medio campo y encontraron con facilidad las brechas en la defensa italiana.

Todavía no se había cumplido la media hora de juego y el plan más optimista de Wenger se estaba cumpliendo con puntualidad ante un Milán caótico, con el brasileño Robinho y el sueco Zlatan Ibrahimovic desaparecidos en el ataque.

En el segundo tiempo, las ocasiones más claras continuaban creándose del lado inglés, que en el 59 vieron como la fortuna se aliaba con Abbati para que el italiano evitara por dos veces, muy cerca de la línea de gol, que se colaran en su portería los remates de Gervinho y Van Persie.

Los locales ya no tuvieron el estado de gracia que habían disfrutado en el primer tiempo y, a pesar de sus numerosos intentos y del frenesí de los últimos compases del choque, cayeron eliminados ante una afición que vio muy cerca el milagro en Londres.