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Turismo

Si viaja a Francia, tiene que visitar Poitiers, la ciudad medieval

En la Edad Media, se vio  beneficiada por su relativa lejanía del poder real, lo que permitió a sus habitantes cierta autonomía.
En la Edad Media, se vio beneficiada por su relativa lejanía del poder real, lo que permitió a sus habitantes cierta autonomía.
17 de octubre de 2016 - 00:00 - Redacción de7en7

Pocas ciudades son tan acogedoras y tranquilas en Europa como Poitiers, situada a 2 horas de Francia en el TGV (tren de gran velocidad).  Esta ciudad encantadora es ideal para realizar una visita histórica. Fue fundada por los celtas y hoy es la principal ciudad de la región de Poitou. Según los registros históricos, Poitiers alcanzó notoriedad bajo la dominación romana.

Históricamente tuvo un papel muy importante porque fue allí donde los francos lograron detener el avance de los árabes en el año 732. Se halla entre el Macizo Armoricano y el Macizo Central, en un punto de fácil comunicación entre la Cuenca parisina y la Cuenca Aquitana.

Fue un lugar privilegiado tanto en el ámbito comercial como militar. En la Edad Media se vio muy beneficiada por su  relativa lejanía del poder real, lo que permitió a sus habitantes una cierta autonomía.

Durante este período muchas aldeas se asentaron alrededor de la villa a modo de arrabales. Socialmente se diferenciaron los burgueses, ciudadanos habitantes de la ciudad fortificada, de los aldeanos y campesinos, que vivían en los extramuros.

Poitiers tiene un aire medieval y eso cautiva a quienes la visitan. De ahí que como casi todas las ciudades medievales, por necesidades de defensa y abastecimiento, se sitúa en las inmediaciones de un río.

Hoy en día, es considerada la capital románica de Francia con más de 2 mil años de historia. En esta urbe, se pueden encontrar  dólmenes megalíticos que dan cuenta de su pasado neolítico y las ruinas de la antigua ciudad romana de Lemonun.  Al visitar esta ciudad, los turistas pueden contemplar el baptisterio de San Juan, considerado el monumento más antiguo de Francia.

Este edificio del siglo VII alberga pinturas murales con su espectacular pila bautismal que era alimentada por un acueducto.

Su historia medieval también se refleja en sus numerosas iglesias. Todas ellas son auténticas joyas del arte románico, pero hay una de ellas que le fascinará, y es la iglesia de Notre-Dame la Grande, con su grandiosa fachada. La belleza de sus detalles del siglo XII ha hecho de esta iglesia el símbolo de la ciudad.

 Con relación a las calles, son irregulares por la topografía de la ciudad y el trazado de las calles tenía que acomodarse a las dificultades del terreno.

Las calles más importantes partían del centro, donde está la catedral, y se extendían radialmente, siendo cortadas por calles secundarias que forman una especie de círculo en torno al centro.

Por lo tanto el perímetro de esta ciudad era sensiblemente elíptico. La ciudad no fue el producto de ningún proyecto previo, sino que su estructura es el resultado de un crecimiento natural y orgánico.

Hay muchos habitantes de esta urbe que sostienen que Francia no solo es París y Lyon.  Una gran parte del atractivo de Poitiers reside en que lo antiguo y lo moderno se conjugan de manera armónica.

En esta ciudad podrá encontrar más de 80 edificios declarados de interés histórico que conviven con uno de los parques de atracciones más futuristas de Europa.

Poitiers en diferente, es sinónimo de historia y diversión. En esta urbe se encuentra el Futuroscope, un parque temático donde las atracciones se basan en lo multimedia, las últimas tecnologías cinematográficas, audiovisuales y robóticas del futuro. La construcción del parque empezó en 1984 y se abrió al público en1987.

Fuentes: www.miviaje.com/www.minube.com/www.poitiers-turismo.com/

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