Un provocativo Oliver Stone presenta su 'Snowden' en San Sebastián
Provocativo como de costumbre, el realizador estadounidense Oliver Stone lanzó un duro reproche este jueves a su país por el espionaje mundial al presentar en el Festival de San Sebastián su película sobre el exanalista de inteligencia Edward Snowden.
Esperado por los fotógrafos en la alfombra roja y por los periodistas que abarrotaron la sala de prensa para escucharlo, Stone no titubeó en cargar contra el gobierno de Barack Obama, al acusarlo de haber "duplicado la apuesta" en cuanto a los programas de espionaje de su antecesor, George W. Bush.
"Ahora, en 2016, (Obama) ha creado el Estado de vigilancia mundial más masivo que se haya visto jamás, peor que la Stasi de la Alemania del Este, mucho peor", aseveró en referencia al órgano de inteligencia que espió a la población en la extinta RDA con fines políticos.
Stone aclaró que Snowden, estrenada en salas comerciales el fin de semana pasado en Estados Unidos, no busca ensalzar al exagente de inteligencia como un héroe, sino mostrar las razones que lo llevaron a revelar el vasto programa de espionaje estadounidense.
Asimismo, Stone descartó que busque incidir en las elecciones presidenciales de noviembre en su país, durante la rueda de prensa centrada en temas actuales y no cinematográficos, junto a los actores que interpretan a Snowden y su novia Lindsay, Joseph Gordon-Levitt y Shailene Woodley.
El Snowden del filme, presentado en San Sebastián fuera de competencia, es un personaje asaltado por las dudas sobre la ética de su trabajo, que al final decide entregar a periodistas miles de documentos clasificados, aún a sabiendas de que las consecuencias para él serán tremendas. Ha sido imputado de espionaje y vive refugiado en Rusia.
"La mejor esperanza" es que Obama "con su infinito sentido de clemencia" otorgue un perdón a Snowden, agregó el realizador de películas que no dejan indiferente al público sobre episodios de la historia de su país, como la guerra de Vietnam (Platoon), un oscuro magnicidio (JFK) o los atentados terroristas del 11 de septiembre (World Trade Center).
A concurso por la Concha
En la séptima jornada del 64º Festival Internacional de Cine de San Sebastián (norte de España), entró en competencia por la Concha de Oro El invierno, la ópera prima del argentino Emiliano Torres, una de las dos cintas de América Latina en sección oficial, además de Jesús del chileno Fernando Guzzoni.
También en carrera por el máximo galardón del festival donostiarra fue proyectada la española La reconquista, la cuarta entrega de Jonás Trueba, hijo del prestigioso cineasta Fernando Trueba.
En la película intimista, Manuela y Olmo se reencuentran una noche en Madrid quince años después de haber vivido un primer amor en la adolescencia.
El cine latinoamericano tuvo un espacio destacado en esta jornada, con la presentación de hasta tres largometrajes en competencia en el apartado de Horizontes Latinos.
Michael, un mecánico seguro de haber vivido una revelación divina, se embarca en un viaje para sanar a un amigo de la infancia con un milagro en El Cristo Ciego, apuesta del chileno Christopher Murray, mientras que un joven descarrilado intentará rehacer su vida trabajando en una mina en Viejo Calavera, del boliviano Kiro Russo.
El mexicano Amat Escalante presentó La región salvaje, con la que ganó el premio a mejor director en la Mostra de Venecia, una película que mezcla ficción con realidad para desnudar el machismo y la violencia en México.
Considerado trampolín del cine latinoamericano en Europa, el festival anunció la noche del miércoles dos galardones de la industria a proyectos en construcción para que sean finalizados, que recayeron en los argentinos Eduardo Esteves, con La educación del rey, y Javier Van de Couter, con 7:35am.
El festival donostiarra cierra el sábado con la gala de premiación. (I)