Cuando se fundó el Sindicato de Músicos “Guayaquil”, hace 81 años, sus primeros miembros buscaban protegerse de la ola de músicos extranjeros, quienes tenían más contratos y difusión.

Su estructura no ha cambiado. Ahora, además de la utópica meta de “promover la unidad entre sus socios”, se implementó una nueva competencia que reivindica sus servicios a la comunidad.

“El objetivo es que la historia y la labor de recuperación del Sindicato deje de ser exclusiva de sus miembros y sirva a la comunidad”, aseguró Ramón Zambrano, director de la Comisión de Proyectos Culturales y Vinculación.

La idea es que el organismo se convierta en una especie de plataforma para la exposición de proyectos musicales. El proceso para llevarlo a cabo se asienta en la Comisión de Proyectos, Planes y Formas, creada hace dos años para socializar y vincular a la academia en este plan.

En la actualidad, los 1.200 miembros activos tienen la opción de recibir charlas informativas sobre la Ley Orgánica de Cultura y en forma paralela se dictan talleres de canto, piano y guitarra. Pero el proyecto alcanza a otros grupos, por lo que tiene  un tinte social dirigido a infantes y adolescentes de escasos recursos de varios sectores de la urbe.

Directivos y docentes de las carreras de Arte y Música de las universidades Católica de Guayaquil (UCSG), Universidad de Especialidades  Espíritu Santo (UEES) y Universidad de las Artes (UArtes) serán los protagonistas de las asesorías y talleres de varias manifestaciones.

“El proyecto de pasantías en el cual la UArtes, a través del sindicato, va a colaborar será con sus estudiantes del tercer semestre. Ellos darán clases elementales de música, así como teoría”, indica Daniel Orejuela, docente de la UArtes, uno de los vinculados al proyecto.

Gustavo Vargas, director de la Carrera de Arte, comenta que los docentes seleccionados de la entidad ofrecerán desde clases de composición hasta charlas sobre derecho de autor.

“La música une, no divide y desde ese punto de vista debemos asociarnos y estar como un equipo organizado, pues es muy importante para conseguir cosas tanto a nivel político, educativo y de difusión musical”, expresa el director.

La presencia del UEES será con los estudiantes de los últimos años, quienes realizarán prácticas comunitarias que no solo serán de música, sino también de danza y teatro.

Una historia asentada en la lucha
El exmandatario de Ecuador Alberto Enríquez Gallo instó, en 1938, a varios gremios a crear sindicatos para dar soporte a la solicitada Ley de Trabajo y así defender los derechos de los trabajadores.

El primer presidente del Sindicato de Músicos “Guayaquil” fue Nicasio Safadi, compositor  de “Guayaquil de mis amores”.

El aporte que definieron  sus miembros fue de 2 sucres en forma mensual. Actualmente  deben cancelar el 1% del sueldo básico ($ 3,40).

Para solventar el proyecto de la nueva comisión, Zambrano  dice que se solicitó $ 80.000 al Municipio para reestructurar el Sindicato. Para lograrlo se deberá cambiar la Ley de Ordenanza de Fomento a la Cultura para incluir al Sindicato y que reciba su aporte.

La confirmación vendría de la alcaldesa Cynthia Viteri, quien a finales de año podría aprobar este pedido que se agregaría al presupuesto municipal. (I)