La Escuela de Formación de las Artes (EFAN) ha reunido a un centenar de aprendices de música, pintura, fotografía, artes escénicas y capoeira en un espacio que estuvo dos años cerrado en el centro-norte de la capital.

El Pabellón de las Artes es una estructura rescatada de la cumbre Hábitat III que funciona en el parque El Arbolito. Al sur de ese lugar un cerco divide los espacios verdes de los trabajos que se realizan de forma subterránea para el Metro de Quito y, al norte, está el Edificio de los Espejos, de la Casa de la Cultura Ecuatoriana (CCE).

El pabellón es administrado por el Núcleo de Pichincha de la CCE que se reactivó hace un año con la aprobación de la Ley Orgánica de Cultura. Es una institución nueva que tiene 33 funcionarios, jóvenes la mayoría, que fue cuestionada desde los debates de la normativa cuya aprobación le tomó 10 años a la Asamblea.

El expresidente de la CCE y actual ministro de Cultura y Patrimonio, Raúl Pérez Torres, llegó a comparar la creación del núcleo con la de un “núcleo del Banco Pichincha para esta provincia”, pues “cumple las funciones que antes tenía la sede nacional” de la CCE, previamente llamada casa matriz.

El primer funcionario que estuvo al frente del núcleo -luego de las votaciones realizadas en mayo de 2017- fue el comunicador Francisco Ordóñez Andrade, otro exfuncionario de la CCE, que renunció por “motivos personales” en junio pasado.

El mes siguiente el primer vocal del núcleo, Luis García Cañas, fue nombrado como su reemplazo pese a la oposición de algunos miembros de la entidad. La transición en caso de ausencia definitiva del director está establecida por un reglamento (artículo 10) que aprobó la junta plenaria de la CCE, según García, cuya posesión se dio con presencia de los vocales principales (él mismo y Yaffa Arellano), sin los suplentes.

El vocal suplente de García, Santiago Buitrón, solicitó que se lo convocara junto a la segunda vocal suplente, Paulina Izurieta, pese a que en el acta de posesión del 4 de julio de 2018 se concluye que solo se convocó a los vocales principales “siguiendo los lineamientos de austeridad dictadas por el Gobierno Central” (sic).

“No existe un procedimiento establecido para cumplir con la transición”,  explicó García a EL TELÉGRAFO, “nosotros actuamos de la forma que creímos pertinente de acuerdo al reglamento y a la ley”.

Y otra de las discrepancias recientes que tuvieron los vocales, principales y suplentes del núcleo pichinchano, giró en torno a la Asamblea Provincial realizada el 10 de noviembre en el cantón Mejía.

En el pabellón, hace tres semanas, se realizó una minga entre los talleristas y maestros de las artes para remozar las instalaciones que fueron afectadas por espectáculos varios y hasta un robo. En el céntrico edificio del núcleo, en cambio, el inmobiliario para oficina está agrupado en la primera planta.

En el pabellón, el EFAN incluye salas de exposiciones y de talleres que abarcan el yoga y la capoeira. Los materiales utilizados se consiguieron a través de donantes. La danza, el teatro y ballet tienen un espacio en una ciudad que, a decir del maestro Nelson Díaz, tiende a ocupar los espacios públicos con museos en lugar de artes.

En cuanto a la seguridad, el pabellón cuenta con un guardia privado y sus ocupantes realizaron gestiones para que la Policía dé seguridad en El Arbolito.

La nueva proforma presupuestaria calculada por el núcleo es de $ 3’106.000. Este año recibió $ 835.000, de los cuales solo $60.000 (7,19%) fueron al EFAN. (I)

En el Pabellón de las Artes: los maestros Ana María Moncada (teatro), Nelson Díaz (danza contemporánea y ballet clásico) y Jesús Sáenz (música). Foto: Carina Acosta / El Telégrafo

Presupuesto
Montos y proyecciones
Un total de $ 835.000 recibió el Núcleo de Pichincha de la Casa de la Cultura este año; de ese monto $ 60 mil se destinaron al funcionamiento de la Escuela de Formación de las Artes (EFAN) y a la infraestructura del Pabellón de las Artes.

$3 millones es la cifra de proforma de la entidad que dirige García y que tramitó la sede nacional de la CCE.

Directorio del Núcleo
Un director, dos vocales principales y dos  suplentes deben conformar el Directorio del Núcleo de Pichincha de la CCE, según el reglamento de la entidad, en la que laboran 33 gestores culturales.