Nelson Ned, el pequeño que conquistó a América
Complicaciones clínicas como consecuencia de la neumonía, una infección respiratoria aguda y problemas en la vejiga, fueron las causas de la muerte del recordado cantautor brasileño Nelson Ned, según la Secretaría de Salud del Estado de Sao Paulo, que administra el Hospital Regional de Cotía, donde ‘Nelsinho’ fue internado de urgencia la noche del sábado.
Pese a un enanismo que le impidió sobrepasar los 1,12 metros de estatura, en su última entrevista, realizada en diciembre, Nelson Ned afirmó que “nací feliz”.
La carrera de Nelson Ned D’Ávila Pintos comenzó en su natal Ubá, en el estado de Minas Gerais (sudeste) y siguió en Belo Horizonte y Sao Paulo, donde el actor Paulo Gracindo lo bautizó como ‘el pequeño gigante de la canción’, nombre que da el título a una composición autobiográfica de 1996.
Su consagración llegó en 1968 con Todo pasará, ganadora del Festival de la Canción de Buenos Aires y grabada en 40 idiomas.
En la década del 70 se convirtió en el primer artista latinoamericano que vendió un millón de discos en Estados Unidos.
En total, 45 millones de copias fueron vendidas de 32 álbumes grabados, muchos en español, que lo convirtieron en un verdadero ídolo en Iberoamérica.
El Nobel de Literatura 1982, el colombiano Gabriel García Márquez, contó alguna vez que escribía sus obras escuchando a Nelson Ned.
Después de una vida de excesos, de uso de drogas y promiscuidad, como él mismo relataba, se convirtió en la década del 90 a la religión evangélica y su primer trabajo musical en el género gospel alcanzó los primeros lugares en las listas de canciones religiosas.
“Antes de ser evangélico era muy depravado. Ahí, Dios habló conmigo una madrugada: ‘O usted cambia o lo saco de aquí’. Entonces resolví cambiar”, declaró el artista.
Casado en dos ocasiones y con 3 hijos, el artista se separó de su última mujer en 2003, tras sufrir un accidente cerebro-vascular (ACV), cuando pasó al cuidado de sus hermanos Ned Helena, Nelia, Nedson, Neuma, Neyde y Nelcí.
El ACV le dejó secuelas como pérdida de visión en su ojo derecho o tener que desplazarse en sus últimos años con la ayuda de una silla de ruedas, además de padecer diabetes, hipertensión arterial y Alzheimer en fase inicial, que afectó su memoria.
El 2 de marzo, Nelson Ned hubiera cumplido 67 años. (EFE)