La muestra del Pase del Niño en Carondelet recibe a visitantes con villancicos
La exposición de 220 piezas que enmarca el tradicional Pase del Niño es parte del entretenimiento navideño que el palacio presidencial de Carondelet exhibe en su museo este mes.
Esta antigua costumbre ecuatoriana que representa la llegada de Jesús se remonta al siglo XIX, en la época de la colonización española que estuvo influenciada por tradiciones propias de los pueblos indígenas del país.
Los “pases” o “pasos” giran en torno a los personajes principales de la Sagrada Familia: Jesús, María y José.
Uno de gran interés que los guías presentan a los visitantes es el “Paso del niño de Isinche”, que se festeja en la provincia de Cotopaxi (centro del país) y nació con la leyenda de que en una hacienda de la zona apareció la figura del niño en medio de unos bultos de lana.
La exhibición incluye alrededor de 120 trajes y zapatos de los 6.000 que ha recibido este Niño, la mayoría de colores llamativos y confeccionados con lentejuelas, brillos e hilo de oro que muestran al Niño como rey.
También se aprecian fotos del “Pase del Niño Viajero”, figura que fue llevada a Tierra Santa y recibió la bendición papal, de ahí su nombre de “viajero”.
Las paredes del Palacio de Gobierno presentan coloridas y rústicas figuras representativas de Azuay, conocidas como las “cholas cuencanas”, que pese a su hieratismo transmiten la alegría que se vive durante las celebraciones navideñas.
Los villancicos que suelen acompañar los pases populares se han ido fusionando con ritmos nacionales como los sanjuanitos y pasacalles, cuenta Verónica Arias, guía de la exposición en la sede presidencial.
“El propósito es mostrar la diversidad cultural del país, esto refleja cómo las tradiciones extranjeras se mezclaron con personajes propios y se creó una identidad única ecuatoriana”, indica la experta.
La muestra inaugurada en diciembre concluye el 6 de enero, cuando las piezas sean devueltas a las instituciones públicas y privadas que las cedieron temporalmente. (I)