Las dudas en Premio Novela 2013 se despejan
El martes pasado se abrió la convocatoria para participar en el concurso Novela del Año 2013, un reconocimiento al mejor libro de este género publicado el año pasado. El concurso es una iniciativa del Ministerio de Cultura y Patrimonio, que busca instaurar un premio anual, para así fomentar las letras a escala nacional.
Según las bases, el premio está dotado de $ 30.000, sin embargo, recibirlo no es tan simple. Por razones normativas, las instituciones públicas no tienen permitido entregar recompensas ni donaciones. La única excepción es el Premio Eugenio Espejo, entregado por decreto presidencial, que otorga $10.000 y una pensión vitalicia.
Para evitar este obstáculo, la organización optó por comprar los derechos patrimoniales al autor triunfador, por el precio mencionado, y usarlos para publicar 10.000 ejemplares del libro que gane el concurso. Sin embargo, este formato se encontró con varias dificultades, surgidas a raíz de la relación escritores-editoriales.
“La edición de la novela ganadora irá dirigida a gente con poco acceso a los libros”.Durante la presentación, a la que asistieron representantes de editoriales internacionales, como Alfaguara y Planeta, surgió la duda en relación a la falta de claridad en la propuesta. “¿Qué pasa con la edición del Ministerio si un autor tiene contrato vigente a 5 años con la editorial?”, preguntó Osvaldo Obregón, director de Planeta en Ecuador. También se refirió a posibles problemas en la distribución, mencionando que su editorial no estaría interesada en tener que competir con una edición publicada por el Ministerio, que potencialmente puede ser más barata. Sin embargo, agregó que su grupo estaba entusiasmado con el premio, y que lo que buscaban era llegar a un acuerdo.
Dos días después, las dudas parecen disiparse. Como aclara Daniela Fuentes, subsecretaria de Emprendimientos Culturales y organizadora del concurso, la intención es “comprar los derechos de autor a futuro, pero pagándolos de inmediato”. De esta forma, el escritor puede honrar su contrato con la editorial así como beneficiarse de la recompensa.
En cuanto a la distribución, las bases dicen que se haría una vez agotada la edición principal, lo que hizo inevitable la pregunta ¿y si no se agota nunca? Según la Subsecretaria, la nueva estrategia resuelve el problema, ya que “se hará la nueva edición una vez vencido el contrato vigente”.
Por otra parte, la funcionaria aclaró que el concurso representa un “reconocimiento al escritor”, y que la distribución se hará teniendo en cuenta a sectores con poco acceso a libros, por lo que se utilizarán canales alternativos a las librerías comerciales como bibliotecas y centros culturales. Asimismo, la iniciativa se sumará al Plan Nacional de Lectura que desarrolla el Ministerio de Educación, y la novela ganadora se utilizará para promocionar al país en el exterior.