El sueño de ser actores es acariciado por muchos jóvenes, y personas que no lo son tanto, quienes acuden con ese fin a una escuela de teatro, en busca básicamente de conocimientos de interpretación.

Sin embargo, son muy pocas las escuelas de este género que preparan creadores, es decir directores o guionistas.

Santiago Carcelén, director de la Escuela Internacional de Teatro, Creación y Movimiento - Imagino Teatro, junto con su esposa —la chilena Magdalena Soto— están conscientes de esa falencia en Ecuador. Juntos están empeñados en sacar adelante este centro de enseñanza en Quito, que no solo es de interpretación teatral sino también de creación.

Carcelén habla con entusiasmo que para sus clases se apoyan en la metodología de Jacques  Lecoq (1921-1999), que aprendieron en la Escuela La Mancha de Santiago de Chile en un posgrado de Pedagogía teatral.

Los cursos duran dos años y medio (son cinco semestres) y los graduados salen con una titulación de actuación y creación, que es el sello de la escuela que forma no solo actores sino creadores.

El pénsum está concebido para que los alumnos reciban materias que les provean de todas las herramientas de guion, actuación, dirección, puesta en escena, movimiento. Así, cuando finalicen sus clases, ellos están preparados para ser los creadores de su propio teatro.

Actualmente cursan estudios alumnos de Quito, Guayaquil, así como extranjeros de Colombia, Argentina y Francia. “Tenemos abiertos cupos para la escuela profesional, estamos convocando, no      creemos en exámenes de admisión”.

Imagino Teatro cuenta con su propia compañía profesional, donde el número de actores depende del montaje de la obra. La idea “es que todos los egresados tomen parte en la compañía y ahora graduaremos nuestra primera generación”.

En cuanto al pénsum, este comprende varias materias como Análisis del movimiento y el espacio, Análisis de texto, Creación y Karate porque les da una preparación física, disciplina y fuerza de espíritu.

Carcelén destaca que “el error es importante en nuestra escuela; hay que equivocarse y la gente tiene mucho miedo a eso; por ejemplo, los Millennials tienen mucha información, etimología, pero poca vivencia”.

Las edades de los estudiantes van entre 18 y 40 años. El límite de edad, explica, “se debe a que es  una escuela de mucho trabajo físico que requiere flexibilidad, adaptación, que los alumnos no sientan que se lo saben todo; es una escuela que abre la curiosidad y el despertar, en la improvisación del tema; les vamos dando la información, no les decimos todo enseguida sino que la idea es que generen el conocimiento con sus errores”.

La fortaleza de Imagino Teatro radica en que reafirma “el movimiento y la creación como ejes fundamentales; hay escuelas que son solo de interpretación, donde se aprende a hacer un papel de una determinada manera”.

El hecho de abrir el espectro de creación, Carcelén lo explica porque “no necesariamente todos van a salir como actores; quizás alguno encuentra su lugar como director, otro tendrá su fuerte en la puesta en escena del movimiento, otros se dedicarán al drama, la comedia”.

Lo que sí asegura es que el objetivo es “formar personas que van a diversificar el teatro en el país. porque la técnica de Lecoq es contemporánea y consiste en contar historias en distintos estilos, dramático o cómico, contar historias que de alguna manera nos digan algo para lo cual se usan leyes del cine y del teatro”.

La escuela cumplirá su cuarto año de fundada y hace su convocatoria para la tercera generación.

Radica en la Casa del Teatro Malayerba en Quito frente al Churo de la Alameda, en la calle Sodiro al lado de la iglesia del Belén.

Las clases se imparten de lunes a viernes, de 09:00 a 14:00. (I)

La pedagogía de Lecoq se basa en el teatro gestual
Jacques Lecoq (1921-1999) fue un actor, mimo y maestro de actuación francés considerado como un referente del teatro del gesto, quien construyó una pedagogía común para la actuación, la puesta en escena y la escritura dramática.

De la efectividad de las enseñanzas de este maestro habla de por sí la calidad de muchos de sus discípulos como el ganador de un Óscar, Geoffrey Rush, el inolvidable pirata Héctor Barbossa en las cinco películas que componen la exitosa saga Piratas del Caribe, producida por Walt Disney Pictures.

Los estudiantes de la Escuela Internacional de Teatro y Creación del Movimiento Imagino-Teatro en Quito reciben clases basadas en la pedagogía de este genial profesor a través de las enseñanzas de Magdalena Soto y Santiago Carcelén, quienes se formaron en Chile con los postulados de esa escuela.

Los alumnos pasan por clases de máscara neutra, observan las dinámicas de la naturaleza, trabajan con máscaras enteras, medias máscaras que vienen de la comedia del arte, con teatro de objetos, un espectro muy amplio de distintos niveles de actuación.

Es una escuela que no forma mediante talleres ni clases esporádicas sino que ofrece una formación completa con método de trabajo. (I)