Cuando se anunciaron las medidas de confinamiento en una gran parte de los países del mundo para evitar la propagación de la pandemia del covid-19, una gran cantidad de personas empezó a recibir los mensajes de sus exparejas.

El productor Ignacio Fumero tuvo que cancelar una veintena de proyectos teatrales y dos de series, desde París hasta Montevideo.

Junto con el cineasta Santiago Loza había montado Nacido para verte sonreír y trabajaban en un próximo montaje, pero a diferencia de lo que le decían sus amigos, a Fumero no le escribió nadie y él, resentido, no lo hizo tampoco.

“Si querés te envío un mensaje, así no te sentís  tan mal”, le dijo Loza y así nació un texto dramático que ahora es parte de una propuesta escénica que dura 14 días a través de una serie de intercambios por el servicio de mensajería WhatsApp.

“Mi decepción por no quedarme atrás fue el motor de todo esto. Nos parecía algo global”, cuenta Fumero en una videollamada por la plataforma Zoom.

La obra que proponen ya se montó en Uruguay y desde el 25 de mayo empezará a hacer lo propio en Ecuador.

Los interesados deben comprar su entrada por internet y durante 14 días, luego de escoger a uno de los actores del elenco, recibirán una serie de mensajes, notas de voz y videos.

“El actor te introduce en una relación de la que fuiste parte. Ahora estoy recibiendo todos los mensajes que no me llegaron de las propuestas escénicas de Chile, Portugal, Brasil”.

Nixon García, del grupo de teatro La Trinchera, dirige las propuestas de siete actores, en un elenco conformado  por Juana Guarderas, Tanya Sánchez, José Pacheco y Diego Naranjo, de Quito;  Mario Suárez, de Guayaquil; Rocío Reyes Macías y Freddy Reyes, de Manta.  

“Todos tuvimos una relación que no cerró, este amor de cuarentena, estos 14 días de relación se trata de saber cómo está el otro y darle un cierre como sea a ese amor que fue”, agrega Fumero.

Para García, esta propuesta, a pesar de lo completa que puede llegar a ser por el montaje de textos, audios y videos, no se trata de trasladar al teatro a la virtualidad.

El actor y dramaturgo mantense dice que se trata de explorar otras posibilidades escénicas desde la virtualidad. “De a poco hemos ido asumiendo y entendiendo que es un espacio al que en principio rehuíamos, pero que ahora, por las condiciones, debemos asumirlo y aprovechar las virtudes que puede emanar”.

Para García, Amor de cuarentena es una propuesta que está siendo muy enriquecedora, muy motivadora. “Ha surgido un lenguaje artístico, utilizamos esta herramienta para emitir un ejercicio creativo y creador en esta nueva faceta que nos dará elementos creativos muy enriquecedores”.

En opinión de García, como para muchos de los actores de este elenco, esta forma de crear contacto con el público es una experiencia más para volver al teatro. “A la expresión viva con el público en cuanto podamos”. (I)