Aída García Márquez, hermana menor del escritor colombiano fallecido hoy en su casa de Ciudad de México, dijo que confía en que el cuerpo del Nobel de Literatura de 1982 sea trasladado a Colombia y sepultado en su país natal.

"Gabito le pertenece a Colombia y acá debe ser traído. En su tierra, que lo inspiró a escribir casi todas sus magistrales obras, seguro que van a estar más pendiente de él. Ya seguro está al lado de nuestra madre Luisa Santiaga y allá seguro le pide una chicha de maíz, como cuando era un niño", dijo a medios locales.

No obstante, reconoció que son la mujer y los hijos de Gabriel García Márquez -Mercedes Barcha, Gonzalo y Rodrigo-, quienes tienen que decidir en México cómo y dónde se celebrarán las honras fúnebres del escritor.

García Márquez, nacido en el pueblo caribeño de Aracataca en el departamento del Magdalena, fijó su residencia desde hace décadas en Ciudad de México, donde se alejó de la fama y trataba de llevar una vida tranquila y privada.

Aída, quien en los últimos días del novelista y periodista ha ejercido como portavoz de la familia en Colombia, vive en Barranquilla junto con su hermana Ligia, y manifestó que la noticia de la muerte del Nobel la sorprendió mientras estaba cosiendo.

"La familia sabía lo grande que era nuestro hermano. Era el hermano mayor para nosotros después de la muerte de nuestros padres. Nunca nos negó nada, fue muy bueno", afirmó, al señalar también que era "supremamente sencillo y humilde".

Precisamente, esta maestra de profesión recorrió la infancia de su hermano en el libro que publicó el año pasado con el título "Gabito, el niño que soñó a Macondo", el cual, según recordó, le gustó mucho al Nobel.

"Gabo" era el mayor de once hermanos de los que ya han fallecido dos, el también escritor Eligio "Yiyo" García Márquez en 2001 y este año Gustavo García Márquez, quien había sido cónsul de Colombia en Venezuela.