Dos esculturas de cuerpo entero y 3,5 metros de altura de José Martí y Eloy Alfaro fueron elaboradas en Quito, en homenaje al 160 aniversario del natalicio del “Apóstol” cubano y al 101 aniversario del asesinato del líder ecuatoriano.

Tras varias semanas de intenso trabajo por parte de los escultores cubanos Luis Alberto Saavedra, Carlos Óscar y Michel Lugones, y sus ayudantes Andylais Torres, Edelvis García y Feliberto Nieto, las imponentes figuras fueron trasladadas a la ciudad de Loja, por tierra.

En esa capital provincial, el arquitecto cubano Aleixei Argumedo es el autor del proyecto de la Plaza de la Insurgencia, patrocinado por el alcalde de la urbe sureña, Jorge Bailón, a un costado de la ciudad universitaria y el cual rememorará el encuentro de ambos próceres.

Primero fue la estructura metálica donde se fijarían las piezas, luego el modelado en arcilla, el molde de yeso de cada pieza y finalmente su fundición en resina poliéster con fibra de vidrio, el montaje definitivo, la pulida y el acabado con pintura blanco mate.

El coordinador del grupo creativo, Luis Alberto Saavedra, declaró a Prensa Latina que este proyecto refleja la coincidencia histórica del 160 aniversario del natalicio de Martí, el 28 de enero de 1853, con la conmemoración 101 de la “Hoguera Bárbara”, cuando asesinaron a Alfaro, el 28 de enero de 1912.

Tomado prisionero en Guayaquil, Alfaro fue llevado a Quito, donde se había extendido un clima antialfarista, en el tren que él mismo inauguró en su gobierno. El general fue asesinado poco después de ser ingresado en el penal, y su cadáver arrastrado por las calles de la capital, y posteriormente quemado.

Eloy Alfaro nació 11 años antes que José Martí, y la idea de estas obras es reflejar el encuentro de los dos, ocurrido alrededor de marzo de 1894 en Nueva York, aunque no existe una fecha precisa.

Martí muere en combate a los 42 años y su figura es muy conocida, pero de Alfaro la imagen más difundida del “Viejo Luchador” no  corresponde con la época de su encuentro con Martí, donde tendría 53 años, explicó Saavedra.

“Todas las esculturas que hemos visto de Alfaro reflejan el final de su vida, no el hombre universal contemporáneo de Martí, y por primera vez en Ecuador van a verlo en una escultura con 53 años, lo cual requirió un minucioso estudio arquitectónico e histórico”.

Martí le llamó a Alfaro “uno de los pocos latinoamericanos de creación”, como recordó el escritor Alfredo Pareja Diezcanseco en “La Hoguera Bárbara” y el historiador José Antonio Gómez Iturralde el año pasado en una columna de la página Desde mi trinchera.

Dos pedestales con una altura de cuatro metros servirán de base a estas esculturas de 3,5 metros, en forma tal que parece que avanzaran hacia un nuevo encuentro, con Alfaro a la vanguardia de la universidad lojana.

Saavedra reconoció la consagración al trabajo del grupo, que se impuso a las dificultades, estimulado por el compromiso de saber que este Martí es una de sus mayores esculturas fuera de Cuba y que estará junto a la de ese otro gran prócer latinoamericano que fue Alfaro.

José Martí, poeta modernista, fue el fundador del Partido Revoluvionario Cubano y estuvo en el ejército de los mambises (soldados cubanos), durante la guerra de independencia de Cuba.

Tributo al “Viejo Luchador”

Hoy, desde las 15:30, en el Mausoleo Memorial de Ciudad Alfaro se realizará un homenaje a Eloy Alfaro y los mártires de la “Hoguera Bárbara” de 1912. Juan Fernando Velasco, Karla Kanora y la manabita Elizabeth Mera dedicarán cantos patrióticos y pasillos -entre ellos “La tejedora manabita”- en un acto de reafirmación de identidad cultural.