Alfonso Cuarón

No se puede ser más favorito. En las últimas semanas se ha hecho con el Bafta, el Globo de Oro, el galardón del Sindicato de Directores de EE.UU. (DGA) y el del Sindicato de Productores de EE.UU. (PGA) por Gravity.

Es su primera nominación en esta categoría, si bien antes estuvo nominado con el guión original de Y tu mamá también y el montaje y el guión adaptado de Children of Men.

El éxito de Gravity -más de $ 700 millones recaudados- recompensa a más de cuatro años de trabajo en el proyecto, para el que tuvo que esperar a contar con la tecnología propicia para mostrar las imágenes del espacio tal y como deseaba.

"Quiero poner a dormir a Gravity y que mi preocupación sea llegar temprano a la escuela para dejar a los niños", decía hace poco. Y está a su alcance. Cuarón soñaba con ser astronauta de pequeño. Ahora, está cerca del Olimpo del cine.

Steve McQueen

Su presencia en la lista es un hecho histórico. Solo en dos ocasiones hubo directores afroamericanos participando por él: John Singleton en 1992 por Boyz n the Hood y Lee Daniels en 2009 por Precious. McQueen (12 Years a Slave) es la principal apuesta si fallara Cuarón.

El premio llegaría en un año en que han tenido éxito varias historias centradas en personajes afroamericanos, como Fruitvale Station -ganadora de la penúltima edición de Sundance-, el biopic 42 -sobre Jackie Robinson- o The Butler -sobre la vida en la Casa Blanca desde los ojos de un mayordomo-.

Además, el guionista de 12 years a slave, John Ridley, podría ser el segundo afroamericano en ganar el Oscar al mejor guión (tras Geoffrey Fletcher, por Precious).

Martin Scorsese

Tiene 71 años, pero nadie lo diría por la clarividencia, el desenfreno y la energía que desprenden las imágenes de The Wolf of Wall Street, para algunos la película mejor producida del cineasta en los últimos 20 años.

Es su octava nominación en esta categoría tras Raging Bull (1980), The Last Temptation of Christ (1988), Goodfellas (1990), Gangs of New York (2002), The Aviator (2004), The Departed (2006) -por la que ganó el Oscar- y Hugo (2011).

Conocido por sus cintas que abordan la vida ítaloamericana y los conceptos de culpa y redención católicos -películas que le dieron fama en las décadas de los 70, 80 y 90-, su siguiente filme será Silence, encabezado por Andrew Garfield y Liam Neeson, sobre las dificultades de los misioneros jesuitas en Japón.

David O. Russell

El año pasado su película Silver Linings Playbook se convirtió en la primera obra desde Reds (1981) que recibía candidaturas a mejor película, mejor director, mejor guión original y en todos los campos de interpretación, un logro que el cineasta repite ahora con American Hustle.

Además, hace doblete por segundo año consecutivo en las categorías de mejor director y mejor guión original, algo que hasta ahora solo han logrado Billy Wilder, David Lean, Joseph L. Mankiewicz, John Huston, Richard Brooks y Woody Allen.

Últimamente, pareciera convertir en oro todo lo que toca: con The Fighter (2010), 3 de sus 4 actores principales (Christian Bale, Amy Adams y Melissa Leo) fueron nominados.

Alexander Payne

Es su tercera nominación en este campo tras Sideways (2004) y The Descendants (2011). También fue nominado por el guión adaptado de Election (1999) y logró la estatuilla dorada en esa categoría por Sideways y The Descendants.

Su película, tan íntima y personal como las que pueblan su reducida filmografía, narra en blanco y negro la relación entre un padre y un hijo en una ‘road movie’ que tiene como excusa el cobro de un inexistente premio de un millón de dólares. Ambos se embarcan en un largo viaje en coche desde Montana a Nebraska en donde fortalecerán sus lazos.

Las obras de Payne se centran en las relaciones humanas y el paso de la vida, y casi siempre culminan en nominaciones al Oscar para sus actores, como fue el caso de Jack Nicholson y Kathy Bates en About Schmidt, el de Thomas Haden Church y Virginia Madsen en Sideways o el de George Clooney en The Descendants.