Ecuatoriana cristaliza su sueño de la danza fuera del país
El confinamiento no ha sido impedimento para que María Paula Vélez, de 16 años, siguiera adelante con su sueño: la danza, el cual empezó cuando apenas tenía 5 años de edad.
Desde pequeña participó en obras musicales bajo la dirección de productoras como Danzas Jazz y Daemon Producciones. A los 11 años decidió tomar clases de ballet por recomendación de su maestra de contemporáneo de entonces, pues era el camino para convertirse en bailarina profesional.
Dos años más tarde, María Paula formó parte del elenco de la Compañía de Danza En Avant, donde tuvo la oportunidad de ser parte de la producción de obras como “El Corsario”, “Pájaro de fuego”, “La Mer”, “Consagración de la primavera”, entre otras. En ese trayecto se adjudicó medallas de oro y trofeos a escala nacional e internacional.
Es así que la adolescente se hizo también acreedora de una beca completa para el Intensivo de Verano de la Escuela Joffrey Ballet School de la ciudad de New York, en 2019.
En diciembre del año pasado fue partícipe de una Residencia Internacional de Danza Contemporánea en Quito, donde logró conseguir otra beca, esta vez para el Festival de Danza que se llevará a cabo en Colombia, en 2021.
Embajadora
Mientras que a inicios de 2020 fue nombrada Embajadora de Capezio Internacional, marca que brinda accesorios y ropa para bailarines a nivel mundial, convirtiéndose parte del primer grupo de embajadores latinoamericanos.
Asimismo, la bailarina tenía planeado para este año participar en la obra de ballet "Romero & Julieta", tomar talleres y preparar junto a sus maestros un Solo coreográfico que le serviría para competir a nivel internacional, ya que su objetivo es posicionarse a escala internacional.
Sin embargo, sus planes se vieron truncados con la pandemia. Los primeros días y semanas se sintió frustrada, pues no había clases diarias, lo que le impedía mantenerse en ritmo.
Con el paso de los días buscó la manera de solucionar este inconveniente. Fue entonces cuando decidió convertir su dormitorio en un pequeño estudio de danza. Para ello se valió de internet, donde buscó la forma de recibir clases con maestros de todas partes del mundo. Lo hacía a través de los Live en Instagram.
“Me he formado con varios profesores que tienen técnicas vaganova, cubana, americana (…) pero no tenía una técnica definida”, menciona.
Becada
Desde su habitación, ella audicionó para participar en cursos de verano en Europa y Estados Unidos y, entre tantos estudiantes, obtuvo becas completas para tomar programas de estudio, como el Conservatorio de Pennsylvania, Russian Orlando Ballet, artÉmotion dirigido por la solista del Ballet West, y en el Conservatorio CityDance.
Este último le otorgó becas completas en todos sus programas, los que le ayudaron a enriquecer su conocimiento junto al Dance Theatre of Harlem, Koresh Dance Company y formar parte de la coreografía titulada "Corazones en Espera”, junto a la Compañía Focus de Brasil, bajo la dirección artística del brasileño Alex Neoral. También formó parte del taller coreográfico dirigido por el repertorista de Citydance, Robert Priore.
María Paula fue invitada a ser parte de las presentaciones del Conservatorio CityDance en todos sus festivales y competencias, por lo que deberá unirse a ellos antes del 8 de enero 2021.
“La visita de Paula y su participación en el festival como una joven talentosa ecuatoriana se conectaría a nuestros proyectos de intercambio de danza de larga duración con jóvenes bailarines de Río de Janeiro, Brasil”, dice parte de la carta de patrocinio que el CityDance School & Conservatory le envió a la joven y su madre Katherine González.
Incluso le ayudaron a conseguir una house family, pero ella tiene que cubrir ciertos costos. “Todos los becarios de ellos tienen que pagar cierto monto para determinadas cosas; la beca es ilimitada con respecto a las cosas que yo vaya a hacer allá dentro del festival”, aclara la adolescente.
Para poder realizar su viaje está en la búsqueda de sponsor. El tiquete de avión ya le fue otorgado por Banco del Pacífico.
La joven bailarina no se detiene y no para en sus entrenamientos, pues con su danza representará al Ecuador y escalará un peldaño más en el mundo que le apasiona, el de la danza.
“Si hoy en día tiene un sueño, es simple, no se rindan, sean constantes, disciplinados y crean en sus capacidades, no se comparen con nadie, trabajen en su fuerza interior, porque todo tiene su tiempo, tengan paciencia, que Dios sabe lo que es mejor para ti y su tiempo es perfecto”, destaca. (I)