“Dueños de un capital infinito gobiernan el mundo”: Aute
No es la primera vez que viene al país. Fue uno de los invitados ilustres de Guayasamín para Todas las voces todas, concierto en el que estuvo también en la última edición, en diciembre pasado.
Hace 6 años fue condecorado por el presidente de la República, Rafael Correa. Había venido para dar un concierto en Quito, en la gira de promoción de su disco A día de hoy.
Por esos días, se dijo que se presentaría también en el Teatro Centro de Arte de Guayaquil y hasta se vendieron las entradas. Pero a la hora que indicaban los boletos, Aute no había llegado.
Ahora, el cantautor español subirá -mañana- por primera vez a un escenario en Guayaquil. El concierto es parte de la gira de presentación de su disco, El niño que miraba al mar, en América Latina. El sábado, Aute se presentará en Quito, en el Ágora de la Casa de la Cultura.
La portada del álbum muestra, sentados en un malecón, a un niño de dos años y un anciano que miran -claro- al mar. Ambos son Aute, en un montaje que le hicieron sus hijos en uno de sus últimos cumpleaños a partir de dos fotos en que, con más de 50 años de diferencia, el personaje guarda la misma postura.
Si bien el propio Aute ha dicho que los temas de su nuevo álbum los produjo -“como los surrealistas”- de una manera azarosa, hay una amplia visión de los problemas del mundo, donde el autor canta y suena a veces indignado, otras resignado.
El niño que miraba al mar tiene canciones que abordan temas enormes, pero sencillos. Hay ahí una perspectiva casi definitiva de lo que es hoy el mundo.
Perspectiva es una palabra muy amplia... Pero talvez lo que me sucede es que no tengo ninguna perspectiva. En la historia siempre ha habido alternativas, nuevas perspectivas. Hoy por hoy, el gran drama es que no hay perspectiva. Y tiene que haber un salto muy grande para que cambien las estructuras de este sistema.
Alguien decía que “Aute nos vuelve a explicar el mundo”, y talvez es más bien explicar un momento histórico. ¿En qué parte de la historia estamos?
La deriva que está llevando la historia contemporánea, en sentido político, es que deja de ser político y es sobre todo económico. Nos gobierna un grupo de personas dueñas de un capital infinito, y son quienes deciden cómo se reparte el mundo. Es una situación en la historia, y es talvez aquello que decía Marx: que el capitalismo iba a empezar a derrumbarse a partir de que entrara en contradicción consigo mismo... que entrara en conflicto de intereses el propio capitalismo, y que ahí se empezaría a resquebrajar. Talvez estamos empezando a ver esas grandes contradicciones del capitalismo. Ahora son los capitalistas, sin el ismo, porque una cosa es el capitalismo, y otra una corporación de capitalistas.
Todo eso que dice es cercano para usted por el momento que vive España, y Europa en general. Pero de América Latina, adonde viene con frecuencia, las agendas políticas se llaman contrarias al capitalismo. ¿Qué opinión tiene de este proceso político?
Es muy interesante. Es el único proceso con perspectiva, un proyecto de unión de países mirando al futuro, y pensando la política -porque todavía hay política ahí- sobre todo al servicio del ser humano, y no al del poder.
Hace 10 años en Europa no existía crisis, pero en América Latina todo era desastroso. Ha sido como si se invirtiera...
Estoy de acuerdo contigo. Estamos viendo la dinámica contraria. Hace años venían migrantes latinos a España, y ahora son los españoles quienes van a América Latina a trabajar. Son cosas de la historia.
Suena a que la dialéctica de la humanidad es que para que unos estén bien, los otros no pueden estarlo...
Es la teoría de los contrarios, de alguna manera, o “no hay mal que por bien no venga” y viceversa. En esa ecuación, habría que buscar un equilibrio donde no existan ni gran riqueza ni gran pobreza.
En uno de sus nuevos temas, ¡Qué necesidad! usted interpela de forma directa a Dios...
Es una conversación con Dios, aunque él no me responde... Es un monólogo, donde le digo que entiendo todo, incluso aquello que no entiendo de la Creación. Lo que no me acaba de entrar en la cabeza es que haya creado la estupidez.
¿Y qué relación tiene con Dios? Uno se imagina ateos a los trovadores de su generación.
Soy un escéptico. Porque para ser ateo, hay que ejercer una propuesta contra algo que se supone que no existe. El ateísmo es una teoría negacionista. Yo nunca me he acercado a la religión. A un sentido religioso de la vida, sí. La religión es una institución, y no se puede institucionalizar una manera de reflexionar sobre el sentido de la vida. Siempre digo que lo contrario de Dios es El Vaticano. Antes decía “el Papa”, pero este Papa parece que tiene otras maneras, y vamos a darle el beneficio de la duda. Y una cosa es la religión como un negocio, un poder, y otra es tener un sentido religioso de la vida, que es simplemente que alguien tenga una sensibilidad curiosa y se haga preguntas y quiera saber, obtener conocimiento para conocer cuál es el sentido de la vida.
Que Francisco tenga otras maneras suena esperanzador, viniendo de un escéptico...
Aún es demasiado pronto, pero a mí me alegra que irrumpa este personaje en la Iglesia. Habla un lenguaje humano... divino también, pero sobre todo humano. Y es un lenguaje que se echaba de menos en la iglesia desde hace muchos siglos. Ha hecho gestos que merecen atención. Me parece que puede ser un personaje muy importante en la historia contemporánea.
En otra canción de este último disco, Un verso suelto, dice que se ha “rendido al canon del esquema”.
Es un “rendido” entre comillas. Un verso suelto es una canción que tiene un fondo autocrítico, en el sentido de que he querido escribir canciones y trabajar de una manera... cómo te lo diría... más transgresora, y talvez fallé. Y probablemente no ha habido tanta transgresión, cuando me lo he propuesto. Y en ese sentido es una especie de bucle autocrítico.
Varias de esas nuevas letras tienen una alta carga de indignación, pero también se siente un dejo de resignación...
La verdad no lo sé. He empezado a escribir las canciones hace año y medio. Y ése era un poco mi estado de ánimo cuando las escribí. Talvez están muy contaminadas por esta situación política tremenda que estamos pasando, porque es inevitable no sentirse contagiado por ese estado de ánimo personal y colectivo. Las canciones salieron así, pero a lo mejor, en el próximo disco, me salen 10 canciones pornográficas.
En otro momento ha dicho que es verdad que los artistas, de viejos, vuelven a lo esencial...
Estoy volviendo hace un tiempo ya a la pintura. Durante muchos años estuve sin pintar. Y llevo un par de meses encerrado en mi estudio pintando, recuperando todo ese tiempo que no tuve relación con la pintura. En ese sentido hay una vuelta a los orígenes.
Las entradas en Guayaquil están a la venta en Musicalísimo (Mall del Sol), en la Isla Ticketshow de San Marino, Mr. Books (Village Plaza). En Quito, se venden en los locales de Musicalísimo. También pueden adquirirse en ticketshow.com.